El Monasterio de Piedra, opción turística contra el calor
¿Sabías que en el Monasterio de Piedra la temperatura baja entre 5 y 10 grados respecto a la habitual? ¿Y que cuenta con una explotación de abejas que produce miel y jalea?

¿Qué nos ofrece el Monasterio de Piedra este verano? Hablamos con Clara Gormedino, responsable de comunicación
Madrid - Publicado el
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Ante el calor, te proponemos un plan con el que disfrutar de un ambiente fresco con hasta 10 grados menos de temperatura respecto a ciudades como Zaragoza. Se trata del Monasterio de Piedra cuyo jardín está catalogado como conjunto de interés cultural. Su parte monumental es también bien de interés cultural.
Un espacio único donde destaca el monasterio cisterciense del siglo XIII, su hotel con spa y por supuesto, su parque y jardín histórico. Antes de la pandemia, el Monasterio de Piedra era visitado cada año por 310.000 personas. Este verano no se está recuperando ese nivel de visitantes. Las olas de calor pueden tener mucho que ver porque quizás, lo que no sepan los visitantes es que en el Monasterio de Piedra la temperatura baja hasta 10 grados
"Hemos notado un descenso de los visitantes. Está siendo un verano atípico, por debajo de lo habitual. Los veranos de la pandemia fueron positivos, pensábamos que la tendencia se iba a afianzar pero nos estamos quedando algo lejos. Quizás el alto precio de los combustibles y la crisis económica pueden tener algo que ver. Las olas de calor también pueden influir, pero hay que destacar que en el Monasterio de Piedra la temperatura es muy agradable por la abundante vegetación, el río, las sombras de los árboles... Ello hace que la temperatura se mantenga entre 5 y 10 grados por debajo de lo habitual en otras zonas", afirma en COPE Clara Gormedino, responsable de comunicación del Monasterio de Piedra.
EL MONASTERIO DE PIEDRA, UN IMPULSO A LA APICULTURA LOCAL
En el compromiso del Monasterio en política mediambiental se fomenta el cuidado y preservación de abejas a través de una explotación apícola. Cuenta ya con 20 años de antigüedad y se compone de 80 colmenas que son supervisadas por apicultores locales. Las abejas son claves en el equilibrio mediambiental por el proceso de polinización, pero además su producción de miel, cera, propóleo o jalea contribuye al sostenimiento del comercio de la zona.
Hay habilitada una zona con múltiples colmenas activas y supervisadas por apicultores locales. Estos profesionales siguen una tradición familiar desde hace generaciones. "La sostenibilidad es piedra angular de nuestra política. Durante nuestros 800 años de historia se ha mantenido el respeto al medioambiente. En este sentido, es importante el papel de las abejas en el equilibrio medioambiental. Cedemos los terrenos a apicultores de la zona que se encargan del manteniendo de las 80 colmenas. También comercializan los productos que obtienen como miel o jalea", asegura Gormedino.
Además de la miel, el Monasterio dedica un total de 300 hectáreas a otros cultivos como el trigo, la cebada, el maíz o las almendras. Desde su fundación hace 800 años, el Monasterio siempre ha aplicado prácticas medioambientalmente sostenibles. De hecho, los propios monjes se autoabastecían cultivando las tierras y utilizando los recursos naturales del parque, entre ellos, hierbas medicinales, alimentos o madera.
En esas acciones medioambientales y encaminadas a la economía circular, el Monasterio de Piedra también cuenta con una pequeña central hidroeléctrica, una central de biomasa que proporciona calefacción y agua caliente al complejo y una depuradora. Su hotel ha conseguido la máxima calificación energética en un edificio de más de 800 años de historia.