Alhama de Aragón se vuelca con los viajeros de un tren parado: “Se los llevaron a casa”
El Ayuntamiento habilitó el pabellón y los vecinos abrieron sus puertas para dar cobijo y comida a los afectados

Así se ha vivido en Alhama la ola solidaria con los viajeros del tren parado por el apagón
Zaragoza - Publicado el - Actualizado
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En las situaciones más difíciles, aflora la solidaridad de las personas de forma extraordinaria. El apagón generalizado que se vivió este lunes generó el caos absoluto en todo el país, pero también nos ha dejado escenas que nos devuelven la esperanza.
El tráfico ferroviario quedó interrumpido afectando a miles de viajeros. Los pasajeros se quedaron atrapados en los trenes y tuvieron que ser rescatados. Uno de esos convoyes que quedó varado fue un Ouigo con destino Madrid, que se detuvo a las 12,33 en la localidad zaragozana de Alhama de Aragón, cerca de Calatayud. En total, a bordo iban 482 personas entre viajeros y tripulantes. Había de todo, familias enteras, jóvenes, mayores, españoles y también turistas extranjeros que viajaban a Madrid para coger vuelos internacionales.
Los pasajeros pasaron horas sin poder comunicarse con la compañía y, de hecho, no fue hasta las 16h cuando la Guardia Civil recibió el aviso, en medio de todo el caos nacional.
“Nos enteramos cuando vimos venir andando a personas con equipajes, cansados de estar en el tren se echaron a andar y fue entonces cuando nos empezamos a movilizar”, ha explicado a COPE la alcaldesa de Alhama de Aragón, María Pilar Marco.
Se pusieron en marcha tanto la Guardia Civil y los Bomberos, ya que en este momento la localidad contaba con un camión de Bomberos que estaba revisando las posibles urgencias ciudadanas y también las necesidades de los Balnearios de la zona, donde se encuentran varios complejos termales.
En tiempo récord, entre Guardia Civil y los agentes de la Policía Local de Alhama y Calatayud, consiguieron un autobús para evacuar con seguridad a los viajeros. “Estaban parados al sol”, recuerda Marco.
“Me llamó el alcalde de Calatayud para preguntarle si podía disponer del pabellón municipal y le dije que por supuesto que sí, que se abrían las puertas del pabellón y del pueblo entero”, asegura la alcaldesa de Alhama, quien movilizó a los concejales para coordinar el operativo.
Y en ese momento, la humanidad mostró su mejor cara y los vecinos se volcaron ante esta situación. “Un río de coches subió donde estaba el tren, en el término de San Gregorio, para bajarles al pabellón y rápidamente nos coordinamos para traerles algo de comer de los establecimientos del pueblo, que abrieron sus puertas”, explica.
Cuando empezó a entrar la noche, la ayuda fue más allá. “Había gente mayor, familias con niños e incluso con bebés y había que darles una solución” por lo que hubo “muchas familias del pueblo que acogieron a la gente en sus casas y también abrieron sus casas rurales”. Otras personas acabaron alojadas en los balnearios.
Una concejal y un trabajador de Ouigo se desplazaron a Calatayud a comprar comida a un supermercado para poder darles de cenar. “Para entonces, ya teníamos un montón de mantas, hamacas y todo el mundo estaba acomodado”, relata Marco.
Cuando volvió la luz, pasadas las 22,00h, se desató la alegría. “Hubo aplausos y ovaciones”, rememora la alcaldesa. En el pabellón incluso sonó la música de algunos viajeros que llevaban consigo guitarras y otros instrumentos de cuerda, con los que amenizaron la estancia.
TRASLADO A ZARAGOZA
El CECOPI (Centro de Coordinación Operativa Integrada del Gobierno de Aragón) se puso en contacto con el Ayuntamiento de Alhama para comunicarles que ponían a disposición de los viajeros atrapados varios autobuses para trasladarlos a la Estación de Delicias de Zaragoza, donde se estaba centralizando el operativo. Para entonces, unas 100 personas se habían ido ya a Calatayud, donde fueron acogidas en el Politécnico.
Pero no todos los que se habían quedado en Alhama quisieron viajar a Zaragoza. “Ante la incertidumbre de lo que se iban a encontrar, y como ya estaban bien atendidos y acogidos, decidieron quedarse”, asegura Marco.

Traslado en autobús a Zaragoza de las personas atrapadas en el tren parado en Alhama
En el pueblo se quedaron unas 150 personas, 30 de ellos en el pabellón y el resto repartidos en casas particulares. “Avisamos al CECOPI de que se quedaban aquí y quedamos a las 9,00h con todos los alojados en el municipio”, señala. Eran poco más de las 10,00h cuando los han recogido en autobús para llevarlos, esta vez sí, a Zaragoza, para reanudar el viaje a sus respectivos destinos.
“Todos hemos puesto nuestra mejor disposición”, relata orgullosa la alcaldesa de Alhama, que puede presumir de la oleada de solidaridad que se desplegó en el pueblo. Seguro que los viajeros afectados nunca olvidarán el día en que los vecinos de aquel municipio de 700 habitantes les abrió las puertas de sus casas de par en par.