Además de la laxante, estas son las otras numerosas propiedades que debes conocer de las brevas
Ahora que se acerca la temporada de las brevas, debes conocer las otras muchas propiedades que tiene esta fruta, además de la laxante
Redactor
Tiempo de lectura: 3'Actualizado 08:18
La breva es el fruto de la higuera o ‘ficus carica’, que es su nombre científico, árbol precedente de oriente medio. Es una de esas frutas que, además de complacer nuestro paladar, por su intenso sabor, es muy saludable y beneficiosa para nuestro cuerpo.
LA BREVAS ENGORDAN: FALSO
Es precisamente ese intenso sabor, y su especial perfume y dulzor, el que hace que mucha gente piense que es una fruta excesivamente calórica, por lo que evitan tomarla. Aunque la realidad es bien distinta. De hecho, cada cien gramos de brevas nos aportan unas 70 calorías.
Si la comparamos con las aproximadamente 55 calorías que nos pueden aportar la naranja o la piña, o las 46 de la manzana, nos daremos cuenta de que es una fruta totalmente adaptable y asumible en cualquier dieta, especialmente por su importante valor nutricional.
No en vano, en 100 gramos de brevas 80 de ellos son agua, 16 gramos son hidratos de carbono, 3 gramos de fibra, 0,7 de proteína vegetal con todos los aminoácidos esenciales y sólo 0,3 gramos de grasa.
PROPIEDADES Y BENEFICIOS
En cuanto a sus propiedades, sin duda alguna, una de las principales y más conocidas es su leve efecto laxante, que se debe al importante aporte de fibra que tiene su consumo y que nos ayuda al tránsito intestinal. De ahí, que sea un alimento especialmente recomendado para los casos de estreñimiento, así como para aquellas personas que sufren problemas de digestiones lentas o pesasdas.
Gracias también a la fibra que nos aporta la breva, es un alimento recomendado para reducir los niveles de colesterol, pues nos ayuda a reducir su absorción.
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También es muy beneficioso su consumo por parte de aquellas personas que sufren problemas de corazón, herpertensión, etc., por su bajo contenido en sodio y su elevado contenido en potasio. Precisamente la presencia de este último mineral, favorece también la regulación de los líquidos corporales.
Otras de las propiedades que hemos de destacar de la breva es que, gracias a la vitamina C que nos aporta, aumenta la absorción de hierro de los alimentos de origen vegetal que consumimos, por lo que es genial para prevenir y mejorar la anemia ferropénica.
Su consumo es especialmente recomendado para las personas que practican deporte, por las importantes cantidades de potasio que aporta la breva y que ayuda a la producción de masa muscular, además de participar en la regulación del sistema nervioso y el ritmo cardíaco.
No podemos tampoco pasar por alto, la ayuda que la breva presta para mantener en perfectas condiciones nuestro cabello, mucosas y huesos, gracias al contenido den Provitamina A que posee.
Además, es una magnífica arma para luchar contra el envejecimiento de la piel, gracias a su importante aporte de antioxidantes que, por otro lado, también nos ayuda a reducir los posibilidades de sufrir enfermedades degenerativas e incluso algunos tipos de cáncer, en especial el de colon.
CONSEJO PARA CONVERSAVARLAS EN LAS MEJORES CONDICIONES
A la hora de comprar y conservar las brevas, deberemos de atender una serie de recomendaciones, para escoger las piezas ideales para su consumo. Si lo hacemos podremos disfrutar de esta fruta en su máxima plenitud y hasta una semana después de haberlas adquirido.
Para empezar, escoge siempre brevas maduras pero no rajadas. Colócalas en un tapper, en cuyo fondo previamente has de poner de dos a tres capas de papel adsorbente, siempre en posición vertical con el rabito hacia arriba, en una sola tanta pero sin apretujarlas ni aplastarlas. Luego coloca otras dos o tres capas de papel adsorbente para taparlas.
Debes acordarte de sustituir estas capas superiores de papel adsorbente todos los días puesto que, aunque la fruta está recolectada desde hace unos días, siguen generando humedad ya que siguen respirando. Así, evitaremos que se nos pudran.
Debido a que es una fruta de temporada, que se recolecta en los meses de junio y julio, es fundamental conservarla en el frigorífico para que nos aguantes y, porque, además, su consumo con cierto punto de refrigeración es siempre más agradable.
Después de esto, ya sólo queda esperar a que llegue junio para poder disfrutar de esta exquisita fruta.
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