Linares demuestra su potencial con las Fiestas Íbero Romanas de Cástulo
El Ayuntamiento de Linares resalta el enorme potencial de estas fiestas, como un enorme reclamo turístico, que repercute muy positivamente en la economía de la ciudad

Íbero Romanas de Cástulo
Jaén - Publicado el
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Linares ha vuelto a brillar con luz propia gracias a la XII edición de las Fiestas Íbero Romanas de Cástulo, que han dejado un excelente balance tanto en participación como en impacto económico. El Ayuntamiento ha subrayado el "gran ambiente vivido" durante estos días, en los que la ciudad se ha volcado para revivir con orgullo su pasado milenario.
El concejal de Turismo, Enrique Mendoza, ha destacado la afluencia masiva de vecinos y visitantes, con cifras como más de 3.000 personas en los desfiles de tropas y legiones y casi 6.000 espectadores en el gran circo de la Plaza de Toros. Espacios emblemáticos como el Paseo de Linarejos o la plaza de toros se llenaron de vida, ilusión y pasión por la historia.
Estas fiestas no solo suponen un viaje cultural al pasado, sino también una excelente herramienta de dinamización económica en Linares. El comercio, la hostelería y la ocupación hotelera registraron datos muy positivos, especialmente durante los Días de Mercurio, que llenaron las calles de color, algo clave para la economía de la ciudad.
Así pues, Mendoza ha agradecido la implicación de asociaciones, voluntarios y ciudadanía, y ha asegurado que ya se empieza a trabajar en la próxima edición, con el objetivo de seguir consolidando a Linares como una referencia nacional en recreación histórica. “Hemos demostrado que sabemos organizar grandes eventos”, ha asegurado el edil.
En ese mismo sentido, el concejal de Turismo añade que "estamos muy contentos con las fiestas que hemos vivido estos días, con más actividades que nunca, con las calles llenas de linarenses y visitantes, con más de 3.000 personas en los desfiles infantil y general de tropas y legiones, o con casi 6.000 espectadores en el gran circo de la Plaza de Toros, y un Paseo de Linarejos o un campamento de participantes donde podía respirarse ilusión y orgullo por recrear lo que pasaba en esta tierra hace más de veinte siglos".