El párroco de la iglesia parroquial de Santiago de Hinojos, Manuel Beltrán, hizo un vídeo para mostrar la realidad de la techumbre de la iglesia y conseguir fondos para su reparación. Así, dicho vídeo, el cual se hizo viral durante el confinamiento entre los vecinos, sirvió para prender un movimiento solidario y colaborativo con el objetivo de realizar las mejoras y reparaciones que necesita la iglesia, cuyas obras del tejado han finalizado esta semana.

A su llegada, Beltrán pudo comprobar cómo se mojaba el templo al estar la techumbre deteriorada, lo que impedía que se pudieran realizar los cultos, por lo que, a raíz del mencionado vídeo, se pusieron en marcha, con la implicación de un grupo de voluntarios, distintas acciones para recaudar fondos, así como se dispuso una cuenta corriente para realizar donaciones. (ES28 2100 2705820210077847).

Entre las iniciativas solidarias, se encuentra la impulsada por el coro parroquial que grabó un disco para venderlo y recaudar fondos e incluso se ha elaborado un vídeo por parte de los jóvenes para explicar cómo se pueden desgravar los donativos y animar así a donar.

"Entre todos se pueden hacer muchas cosas porque no es solo la techumbre sino que no hay lugares para la catequesis, por ejemplo", ha dicho el párroco, que ha destacado que con esta intervención se han logrado recuperar unas antiguas almenaras que se encontraban tapadas.

Beltrán se ha mostrado consciente de que en mitad de la pandemia "no era el mejor momento" para pedir ayuda a los vecinos pero estos "han demostrado que, con el amor a su templo, se pone de relieve que celebran su fe". El vídeo, que en su primera parte hace distintas advocaciones marianas, mostraba cómo se mojaba la parroquia y llamaba a colaborar.

De este modo, como la obra del tejado no podía esperar más "los vecinos de Hinojos se han volcado para afrontar esta actuación histórica".

Esta semana ha finalizado la parte más importante del tejado, la relativa a toda la sustitución de las tejas, y ahora queda comprobar la impermeabilidad de los trabajos realizados y continuar con la recuperación del coro en el interior del templo.

Una vez terminado, la iglesia parroquial necesitará un pintado de todas sus paredes y una limpieza integral del edificio, que será otra fase del proyecto. Mientras tanto, los feligreses disfrutan de todo el proceso. Se trata, como ha indicado Beltrán, de que las actuaciones se hagan con empresas locales para favorecer la creación de riqueza y empleo en esta compleja situación actual.