Esta semana pasada, hemos vivido unos días grandes e importantes para Huelva. Varios acontecimientos han coincidido, que nos han dejado destacados titulares, y lo mejor es que son de carácter positivo.

Empezando por lo más reciente, la semana acababa con la peregrinación extraordinaria de la Hermandad del Rocío de Huelva, para celebrar la Eucaristía ante la Virgen, en la Iglesia de Almonte. Tras dos años sin poder hacerlo y con el recuerdo vivo y sentido de todo lo pasado, el Simpecado llegaba a las plantas de la Virgen del Rocío, ante la emoción de todos los presentes; hermanos, la Junta de Gobierno de la Hermandad, con su Presidente y Hermana Mayor al frente, las autoridades de la ciudad, encabezadas por el alcalde, llenaban el templo parroquial, viendo así su sueño cumplido.

El día anterior, la Hermandad de Huelva pudo disfrutar de una magnífica jornada en su camino y convivencia tradicional, para llegar en la tarde noche del sábado al Rocío, donde esperaba el Simpecado, bellísimamente entronizado en la capilla de su Casa Hermandad, para rezar el Rosario por la noche, acompañado por los cantos del coro joven de la Hermandad.

Fue una magnífica peregrinación la de Huelva, y un fin de semana grande este pasado, el que vivimos en Almonte, también con Hermandades tan señeras como las de Coria, Umbrete o Bollullos del Condado, y con el Via Crucis organizado por las Hermandades de Cádiz y Ceuta. Todo nos acerca ya y nos hace soñar, con esas fechas ilusionantes largamente esperadas, de mayo y junio.

Pero decía que había sido una semana grande para Huelva, pues el pasado viernes, la ciudad se manifestaba, de una manera extraordinaria y multitudinaria, uniendo a todos los sectores de la ciudad, alzando la voz ante las administraciones competentes, reivindicando unas justas e históricas reclamaciones, de una serie de medidas e infraestructuras esenciales para la ciudad y la provincia, que tanto necesitamos y que son una deuda pendiente del estado con Huelva, y que debe saldarse de manera inmediata, para alcanzar todas las potencialidades y posibilidades de progreso y desarrollo, que nuestra tierra merece.

Y el día anterior, recordábamos también otra efeméride importante para Huelva, como es el 34 aniversario de la creación de nuestra Universidad. Uno de los grandes logros, ese sí, que pudo alcanzarse, y que hoy se encuentra plenamente consolidada, dentro de la oferta de universidades andaluzas, como un motor para toda la provincia, abanderando la formación de nuestros jóvenes, así como la investigación y desarrollo, y ofreciendo todas las posibilidades que la Universidad puede ofrecernos.

Por último, y mirando al mundo cofrade y al tiempo de cuaresma que vivimos, algunas importantes Hermandades de penitencia de la ciudad, pudieron por fin, celebrar sus actos y cultos extraordinarios, como via crucis procesionales por las calles de la ciudad, largamente también esperados.

En este tiempo que estamos viviendo, en que casi todo lo que nos llega, son desgraciadamente malas y desalentadoras noticias, en casi cualquier ámbito que miremos, podemos pues alegrarnos, y dar gracias a Dios, de que Huelva y toda la provincia, hayamos podido vivir y disfrutar de esta semana tan importante, llena de acontecimientos positivos y alentadores, que es lo que ahora todos necesitamos.