El Castillo Ducal de Espejo: historia, leyendas y experiencias únicas en la campiña cordobesa
Situado sobre el Cerro de la Merced, esta fortaleza combina legado medieval y nobleza, y se encuentra dentro de la ruta Castle Love

Especial Espejo
Córdoba - Publicado el
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Nuestra ruta de castillos en COPE nos lleva hasta la localidad de Espejo, un enclave que alberga una joya patrimonial: el Castillo Ducal de Espejo. Situado sobre el Cerro de la Merced, esta fortaleza combina legado medieval y nobleza, y se presenta como un referente cultural que permite conocer la historia de la zona y disfrutar de experiencias únicas para visitantes de todas las edades.

Antonio Rodríguez
“Cada piedra narra leyendas, misterios y la vida de quienes habitaron sus muros”, nos cuenta Antonio Rodríguez, historiador y guía turístico, quien nos acompaña durante la visita. La ubicación del castillo, a 418 metros sobre el nivel del mar, lo convierte en un punto estratégico desde el que se podía vislumbrar cualquier posible ataque con antelación, lo que explica su relevancia histórica.
Cada piedra narra leyendas, misterios y la vida de quienes habitaron sus muros”
Historiador y guía turístico
"El origen del castillo se remonta al noble castellano Pay Aria de Castro, bajo el reinado de Fernando IV, y a lo largo de los siglos ha sido testigo de distintos momentos históricos y sociales", nos cuenta este joven historiador. Entre ellos destaca un acontecimiento de relevancia para la nobleza y el pueblo: en 1946, la boda de la XVI duquesa de Osuna se celebró en esta localidad, con la ceremonia religiosa en la iglesia y el banquete posterior en el castillo, un evento que contó con la asistencia de numerosas personalidades.

Comedor
La fortaleza esconde también leyendas que alimentan su halo de misterio. Rodríguez relata la historia de la “Reina Mora”, una princesa que supuestamente utilizaba los pasadizos subterráneos para escapar en caso de ataque y relajarse en los restos romanos de la Albujera. Aunque hoy los pasadizos están tapiados por motivos de seguridad, la estructura original permanece y puede observarse en diversas galerías y aljibes de la época musulmana.

Una de las estancias
El recorrido por el castillo permite descubrir estancias como la Sala del Sagrado Corazón, decorada con cuadros de temática religiosa y familiar; el comedor principal, con vajilla de plata y cubiertos con el escudo de la Casa de Osuna; y la mazmorra, transformada hoy en sala de estar, pero que durante la Guerra Civil sirvió como prisión. “Aquí permanecen restos rojos que, según la leyenda, serían la sangre de los republicanos fallecidos defendiendo la fortaleza”, relata Rodríguez.
PROGRAMACIÓN
El Castillo Ducal de Espejo no solo conserva historia y leyendas, sino que ofrece una programación cultural activa durante todo el año. Andrés Antúnez, encargado de la coordinación, explica que las actividades se diseñan atendiendo a la demanda y a la estacionalidad: “Intentamos adaptarnos a la primavera, verano y otoño, creando productos que mezclen historia, gastronomía y experiencias interactivas”.

Andrés Antúnez
Entre las actividades más demandadas destacan las visitas guiadas regulares y las visitas teatralizadas con personajes históricos, como los Reyes Católicos o la ama de llaves “la Reme”, que hacen el recorrido más interactivo y ameno. Antúnez destaca que el objetivo es que los visitantes “no solo vean un castillo, sino que vivan la experiencia, que recorran sus estancias y disfruten de la campiña cordobesa desde un 360º privilegiado”.
El castillo también se abre a la celebración de eventos en su Patio de Armas, un espacio diáfano y adaptable para bodas, comuniones, exposiciones o reportajes fotográficos. “El último evento fue una boda con unas 400 personas y realmente quedó precioso”, señala Antúnez, quien insiste en la importancia de integrar la historia con la experiencia vivida por los visitantes.
El último evento fue una boda con unas 400 personas y realmente quedó precioso"
Coordinador de Eventos
Otras estancias, como la biblioteca o el “Balcón de Doña Juana”, permiten disfrutar de vistas espectaculares de la localidad y de la campiña, mientras se revive la leyenda de Juana I de Castilla, conocida como Juana la Loca, que según cuenta la tradición se refugió en el castillo durante una tormenta camino de Granada.

Una de las vistas desde la parte superior del edificio
La visita al Castillo Ducal de Espejo es, por tanto, un viaje en el tiempo que combina patrimonio, historia y cultura. Cada rincón, desde las galerías subterráneas hasta los patios y salones nobles, permite conectar con el pasado y disfrutar de la riqueza histórica de la zona. Como explica Antúnez: “Tratamos de enseñar, acoger y hacer que los visitantes se lleven una experiencia completa, donde historia y diversión se entrelazan”.
Quienes deseen conocerlo o participar en sus actividades pueden informarse a través de la web oficial del castillo y sus redes sociales. La fortaleza ofrece un recorrido que va más allá de lo visual: permite tocar la historia, escuchar sus leyendas y sentir la vida que se ha desarrollado entre sus muros a lo largo de los siglos.
El Castillo Ducal de Espejo, con su historia, leyendas y programación cultural, se consolida como un destino imprescindible en la ruta de castillos de Córdoba, donde pasado y presente se entrelazan para ofrecer experiencias inolvidables.
ESPEJO ES MUCHO MÁS
Aunque su fortaleza domina el paisaje y resume siglos de historia, este municipio de la Campiña cordobesa guarda un valioso patrimonio que se descubre paso a paso, con calma, dejándose llevar por la voz de quienes mejor lo conocen, como el historiador y cronista oficial Miguel Ventura.
La iglesia parroquial de San Bartolomé, declarada Bien de Interés Cultural, es una parada obligada. En su interior se conserva el retablo de Pedro Romana dedicado a San Andrés, una joya del siglo XVI que fascina tanto a los amantes del arte como a quienes lo descubren por primera vez. En esta misma parroquia se alberga un museo de orfebrería con más de medio centenar de piezas, entre las que destacan la Cruz Procesional de Diego Fernández y la Custodia labrada por Bartolomé García de los Reyes, considerada una de las más bellas del siglo XVIII español.
Pasear por Espejo es viajar en el tiempo: desde la casa señorial de Cristóbal Manuel de Gracia y la ermita de Santa Rita, hasta la singular capilla octogonal de San Miguel o el histórico Paseo de Andalucía —el antiguo “Salón de las Calleras”—, flanqueado por viviendas blasonadas que hablan del esplendor de otras épocas.
Y bajo la superficie, late la antigua Ucubi romana, convertida por Julio César en la colonia Claritas Julia. Aún se conservan vestigios como el aljibe del siglo I a. C., la albuera —antiguo depósito de un acueducto romano— o la Pontanilla, puente por donde pasaron las legiones de César y Pompeyo antes de la batalla de Munda.
Espejo, “atalaya de la campiña”, sigue siendo un lugar para mirar y dejarse mirar, con la historia escrita en piedra y alma de pueblo vivo.



