Un jurado popular ha declarado culpable de delitos de asesinato, lesiones psíquicas y atentado a agente de la autoridad a Ana María B. L., acusada de asfixiar mortalmente a su hijo Sergio en Huércal de Almería, y han rechazado que la mujer sufriera alteraciones psíquicas.

Los miembros del jurado han leído en la tarde de este jueves su veredicto, en el que han descartado cualquier tipo de atenuante como la confesión de los hechos o la reparación del daño, y han declarado que el 10 de octubre de 2019, cuando sucedieron los hechos, la mujer no tenía mermadas sus capacidades por un trastorno psicótico agudo transitorio, sino que estaba "en plenas facultades" y mató al niño para aumentar el sufrimiento de su padre.

MATÓ AL PEQUEÑO SERGIO CONSCIENTE

Así, han considerado probado que la acusada se valió de su "superioridad" y que un día después del crimen realizó ante la Guardia Civil una "declaración pormenorizada de los hechos", en la que se evidenciaba una agresión "intencionada, súbita y repentina" ratificada por la autopsia del menor, en cuyo informe se recoge que el niño no se defendió en ningún momento.

De acuerdo a lo que sostenía la Fiscalía y las acusaciones, se prueba que sobre las 09:00 horas del 10 de octubre del 2019, colocó un trozo de tela en el cuello del pequeño y apretó hasta asfixiarlo cuando éste se encontraba "de forma confiada e inocente, tumbado en la cama del dormitorio principal de la vivienda y totalmente ajeno a la intencionalidad criminal de la acusada".

Han subrayado que el padre y familiares del pequeño presentan en la actualidad una sintomatología ansioso-depresiva asociada a la pérdida traumática del menor, y han resaltado la superioridad "física evidente" y el vínculo emocional que tenía con el niño para realizar el asesinato sin posibilidad de defensa por su parte.

También han recalcado que en ningún momento intentó buscar ayuda ni trasladó al niño al hospital, pese a encontrarse en su vivienda de Huércal de Almería, a escasos minutos del Hospital Universitario Torrecárdenas de Almería y que en su lugar lo llevó a la casa de la expareja del abuelo materno del menor, en Las Norias de Daza.

Sobre el delito de atentado a agentes de la autoridad, han declarado probado que desobedeció las órdenes reiteradas de la Guardia Civil para que detuviese su vehículo y que intentó atropellar a uno de los agentes, después de que se personasen en Las Norias.

Sobre el delito de lesiones psíquicas al progenitor de Sergio, han incidido en que mató al niño de forma consciente para "aumentar el sufrimiento" de éste y "menoscabando su salud psíquica", apuntado que la mujer presentaba una actitud "obsesiva y acosadora" con la familia paterna y el progenitor, y que incluso llegó a presentar una "denuncia falsa por violencia de género" en 2017, de la que fue absuelto dos años después.

Al finalizar la vista, la Fiscalía y las dos acusaciones particulares han mantenido sus peticiones de prisión permanente revisable por el delito de asesinato, el Ministerio Público pide también un año y medio por el delito de atentado, pero no contempla el de lesiones psíquicas, si bien no ha modificado su petición, y la defensa ha anunciado que recurrirá el fallo que se dicte.