Una vez levantado el confinamiento por el coronavirus y cuando poco a poco vamos retomando nuestra vida, no podemos olvidar que todavía tenemos que ser prudentes y continuar con todas las medidas establecidas para evitar poder contagiarnos o propagar el virus.

Y también es “importante tener las defensas adecuadas e intentar aumentarlas en este tiempo con una buena alimentación y ejercicio diario”, es lo que nos dice el doctor Juan Carlos Ruiz de la Roja que junto a la doctora Sonia de Miguel Fernández han escrito el libro ‘Coronavirus. Prevención, pandemia y contención’, editado por Catarata, el primer libro sobre la Covid-19 escrito por dos médicos españoles.

Un libro con el que pretenden “acercar el mundo del virus y las posibles enfermedades que pueden producir al gran público en un lenguaje sencillo y que todo el mundo entienda”, comenta el doctor al que escuchamos los sábados en 'Agropopular'.

En sus hojas encontraremos información sobre el coronavirus pero además podemos profundizar en saber “cómo es un virus, cómo se contagia, cómo muta, de dónde vienes este virus y las vacuna y tratamientos que se están investigando” nos explica Ruiz de la Roja.

Nos recuerda el doctor algunos de los síntomas que provoca el coronavirus y cómo a lo largos de los meses se han ido conociendo más “al principio eran como los de una gripe común: fiebre, dolor de cabeza, y rinorrea o mucosidad. De pronto, se vio que había gente con otros síntomas como la pérdida de olfato, del gusto, y también diarrea (cosa que en la gripe no suele ocurrir), gastroenteritis, náuseas, vómitos, diarrea… También, algunas lesiones en la piel, complicaciones neumonía o formación de trombosis (cosa que en la gripe no se suele producir)”.

Lo que más destacan los autores del libro es la importancia de nuestras defensas, de tenerlas bien y la necesidad de poder aumentarlas en este tiempo con una “buena alimentación, ejercicio diario y también controlar nuestras horas de sueño, unas 7-8 horas al día”.

En cuanto a la alimentación nos comenta el doctor que “se ha visto que el consumo de ácido graso es saludable como el aceite de oliva o el aguacate van fenomenal. Así como determinados minerales que ayudan y mejoran las defensas como el zinc. Las legumbres, carnes rojas, pescados, el jamón serrano tiene muy buena cantidad de zinc”.

“Sin olvidarnos del hierro que encontramos en la carne, los huevos, el hígado, mariscos, acelgas o espinacas”.

También son importantes las vitaminas para el desarrollo de las defensas “la B9 que podemos encontrar en espinacas, brécol; la B12 en la leche y los huevos; y por último, la C que previene infecciones respiratorias y que encontramos en el kiwi, cítricos o fresón”.

ALIMENTOS PARA AUMENTAR Y DESARROLLAR NUESTRAS DEFENSAS

A continuación Juan Carlos Ruiz de la Roja nos habla de algunos alimentos que nos ayudarán a aumentar y desarrollar nuestras defensas y de sus propiedades:

Carne de cerdo

La carne de cerdo contiene proteínas de alto valor biológico que son muy necesarias cuando hay una infección, ya que cuando esto ocurre habitualmente suele haber destrucción de proteínas. Contiene vitaminas del grupo B, sobre todo del grupo B1, B3, B6 y B12, fundamentales en la formación de las células de defensa. Además, la vitamina B1 es beneficiosa para la salud del corazón.

Otro de los beneficios de la carne de cerdo es que contiene minerales muy importantes como el zinc, el hierro y el selenio, que son necesarios para el buen funcionamiento del músculo y el crecimiento de las células defensivas. Además, recomienda su consumo a los ancianos y aquellas personas que tengan dificultades para comer ya que la carne de cerdo es muy digestiva.

Guisantes

Los guisantes son muy ricos en una vitamina del grupo A. A la hora de combatir una infección vírica esta vitamina es muy importante ya que se ha comprobado que la mortalidad es más alta si los pacientes tienen déficit. Son ricos en minerales como el magnesio, el cobre, el selenio y el hierro y en proteínas, muy necesaria para la maduración y la formación de células de defensa.

Los guisantes contienen buena cantidad de vitaminas del grupo C y B, en concreto de la B9 que se conoce como ácido fólico y que es necesario para multiplicar las células defensivas, y son muy ricos en fibra, que es muy necesaria para alimentar las bacterias de nuestro intestino. Uno de los síntomas del coronavirus ha sido la afectación del aparato digestivo y tomar esta fibra aumenta las defensas a nivel del intestino.

Miel

La miel contiene hierro, zinc y selenio, que activan las defensas y combaten el crecimiento de los gérmenes, y también ayuda a calmar la tos y es beneficiosa para la irritación de garganta.

Otro de los aspectos positivos de este alimento es que contiene azúcares como la fructosa y la glucosa que dan mucha energía, por lo tanto, es un buen combustible para los músculos y ayuda a combatir el cansancio, algo fundamental para detener el desgaste de la fiebre.

Carne de conejo

El el 25% de su composición de lacarne de conejo son proteínas de alto valor biológico y fáciles de digerir, lo que favorece la recuperación de personas que han estado afectadas por el virus.

Es rica en vitaminas del grupo B (sobre todo, B3, B6 y B12) que ayudan a mejorar las defensas y el estado de ánimo, y tiene una buena cantidad de vitamina E, que evita que las células defensivas envejezcan. Además, tiene una baja proporción de grasa y, la que tiene, es muy beneficiosa para la salud del corazón y para el sistema defensivo.

Almendras

Las almendras son ricas en fibra, lo que mejora el sistema defensivo a nivel del intestino -una localización donde puede estar el virus-. Tiene una buena cantidad de grasas saludables, necesaria para combatir el COVID-19. Contiene minerales como el hierro, magnesio, zinc y fósforo, que ayudan a prevenir cualquier infección a la que podamos estar expuestos, y contiene una elevada proporción de vitamina E, que hace que nuestras defensas sean mucho más efectivas.

Puerro

El puerro es un alimento interesante porque alrededor del 90% de su composición es agua, lo que facilita la expulsión del moco ante cualquier tipo de infección respiratoria. También es rico en minerales como el hierro, magnesio, zinc o selenio, todos ellos implicados en la mejora en la lucha contra el virus.

Asimismo cuenta con una buena proporción de la vitamina A, que mantiene en perfecto estado las mucosas de la boca y de la nariz; el doctor recordó que la boca es la puerta de entrada del coronavirus. También tiene una gran cantidad de ácido fólico, una sustancia muy interesante porque aumenta el número de células defensivas.