enfermería
Guillermo Hermoso de Mendoza abandona el hospital tras superar la meningoencefalitis
El rejoneador navarro ha permanecido ingresado doce días en un hospital de Ciudad de México debido a una grave inflamación cerebral

Guillermo Hermoso de Mendoza, a la salida del centro hospitalario en México
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El rejoneador Guillermo Hermoso de Mendoza ha recibido el alta hospitalaria tras pasar doce días ingresado en el Centro Médico ABC de Ciudad de México. El navarro fue hospitalizado a causa de una meningoencefalitis, una grave inflamación del cerebro y de las membranas que lo rodean, que ha afectado con severidad su estado de salud.
Una recuperación esperanzadora
La situación clínica del torero experimentó una mejoría decisiva el pasado miércoles, momento en el que el equipo médico constató una disminución de la inflamación de entre un 60 y un 80 %. Esta evolución favorable ha sido determinante para que los facultativos autorizaran su salida del hospital para continuar con la recuperación en su domicilio.
Por fin vamos a casa"
@guillehermoso
El propio Hermoso de Mendoza ha compartido la noticia con gran ilusión a través de sus redes sociales, donde ha publicado un escueto pero significativo mensaje. “Por fin vamos a casa”, ha escrito el rejoneador, unas palabras que han sido recibidas con alivio y alegría por parte de sus seguidores y del mundo del toro.
Un diagnóstico complejo y tratamiento intensivo
El ingreso se produjo el pasado sábado 18 de noviembre, cuando lo que parecía ser una infección común derivó en un cuadro grave de meningoencefalitis. El rejoneador navarro presentaba síntomas alarmantes como mareos intensos, vómitos, deshidratación y dificultades para articular frases. La rápida intervención del equipo médico fue crucial para evitar posibles daños irreversibles, aunque la causa específica de la enfermedad sigue sin ser identificada.

Guillermo Hermoso de Mendoza, durante su estancia en un centro hospitalario en México
Durante su hospitalización, Guillermo Hermoso de Mendoza fue sometido a un tratamiento intensivo con antibióticos, antivirales y medicación intravenosa. Los estudios reflejaron una notable mejoría, con una disminución de la inflamación cerebral de hasta un 80% y la inactivación de los focos inflamatorios. Los médicos han descartado secuelas y el torero ya ha comenzado con sesiones de rehabilitación centradas en el equilibrio y la movilidad para acelerar su vuelta a los ruedos.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.



