"'Cobradiezmos? no se indultó solo, también estaba yo delante"

##@## Manuel Escribano es una persona feliz. Su nombre será recordado e irá ligado ya por siempre al de 'Cobradiezmos' el toro de Victorino Martín indultado en la Feria de Abril 2016. ¿Ha sido el toro más bravo al que se ha enfrentado alguna vez el diestro sevillano?, preguntamos. "Posiblemente sí", contestó Escribano, "el más importante y el más bravo. Si alguna vez buscas un toro que raye la perfección, este toro lo rayaba. Pero ojo, el toro no se indultó sólo, estaba yo delante. El toro tuvo unas embestidas que a mi me van fenomenal".El torero de Gerena reconoció en El Albero que cuando se enfrentó a 'Cobradiezmos' "yo estaba muy seguro de mí, sabía perfectamente cómo había que hacerle las cosas, como había que exigirle. Disfruté el momento y las sensaciones. Fue un toro que o te buscaba una ruina muy gorda o te encumbraba. Pero le hice muy bien las cosas para que luciera y fuera a más. Esa conjunción fue inevitable para que pasase lo que pasó".Esa confianza en sí mismo fue fundamental para que el toro no le desbordase, aunque hubo otros condicionantes: "Una de las sensaciones que tuve al principio fue una preocupación interior para que no me molestase el viento, que no me tropezase la muleta... pero luego sabía que le iba a cortar las orejas, que lo iba a cuajar... pero no piensas que te van a indultar un toro en Sevilla. Cuando vi a la gente con ese murmullo y después pidiendo el indulto supe que se iba a conceder. El toro, al final de faena, fue cuando estaba fácil para el torero con muchas embestidas dentro". Escribano quiere que esta actuación en Sevilla "sirva en el futuro, que se me reconozca. El mejor reconocimiento es cuando te dicen que han llorado viéndote torear. Ojalá que las empresas cuenten conmigo. Moralmente va a cambiarme mucho, porque todo el toreo que busco, la forma de entender el toreo, he visto que se puede conseguir. Me da mucha confianza en mi trabajo diario y me da la razón".Sin embargo, no hubo casi tiempo para disfrutar del momento porque cuatro días después de esa tarde, Escribano volvía a estar anunciado en Sevilla. Y un año más, para cerrar Feria con la corrida de Miura. "No me podía conformar con la tarde del indulto. Quería buscar ser el triunfador de la feria aunque sabía que era la de Miura y que no lo iban a poner fácil. No me guardé nada dentro y logré que me tocase la música toreando de capote".Y tras Sevilla, en el horizonte ya espera Madrid y la Feria de San Isidro. Manuel Escribano hará este año triplete aunciándose con las corridas de El Torero, Pedraza de Yeltes y Adolfo Martín. "Estoy muy contento por lo que hemos cerrado en Madrid. Hemos buscado tres ganaderías muy distintas entre sí, de tres encastes distintos, que están en muy buen momento y que necesitan un triunfo porque luchan por estar en lo más alto como yo", finalizó el torero.