"Operación Triunfo" no gana para escándalos. Tras el debate sobre el uso de la palabra "mariconez" en un tema de Mecano, la salida de la profesora Itziar Castro y el posible tongo en la decisión semanal del jurado, se une ahora la indisciplina de los concursantes del talent-show. No es la primera vez que a la nueva hornada de triunfitos se les achaca que trabajan menos y son mucho más ambiciosos que los anteriores concursantes. De hecho, hace dos semanas Noemí Galera tuvo que abroncarles porque bajaban a grabar al estudio sin saberse las melodías de las canciones.

Pero la bronca de esta semana ha sido aún peor. Todo empezó porque el sábado por la noche rechazaron celebrar una fiesta porque se encontraban "cansados". Minutos después, sin embargo, la liaron en su habitación durante la noche tirando incluso papel higiénico y libros por la ventana. Para echar más leña al fuego, a la noche siguiente acordaron hacer una sentada delante de la puerta de la habitación y no generar ningún contenido hasta que se abrieran las puertas, cerradas hasta las 22.30 -en lugar de hasta las 22, como suele ser habitual-. Una imagen que no gustó a los fans del concurso puesto que consideran inoportuno hacer una "huelga" por semejante tontería.

Noemí Galera ha tenido que intervenir este lunes. "Es una vergüenza. Las faltas de respeto no las voy a consentir bajo ningún concepto. Así que espero que os disculpéis con Adriá (la persona del equipo que les abrió la puerta de la habitación)", ha comenzado. En un tono muy duro, Noemí ha llegado a decir que sabe que lo que les dice "les suda todo", pero después les ha mostrado diez tuits de fans indignados con los concursantes. Para terminar, la directora les ha abierto las puertas de la Academia. "Si alguno no quiere estar, ahí tiene la puerta. Que se vaya.  Os recuerdo que habéis entrado aquí voluntariamente. Estoy cabreada y decepcionada. La confianza que tenía en vosotros se ha ido a la mierda pero a la mierda absolutamente", ha concluido.