Estas son las características que deben tener tus gafas de sol para conducir según la DGT

El periodo estival supone un espacio temporal donde los desplazamientos por carretera se incrementan fruto de los viajes vacacionales. Según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) de 2021, entre los meses de julio y agosto del año pasado se produjeron alrededor de 90,8 millones de desplazamientos en el país. Por una simple cuestión de probabilidad, esto aumenta el riesgo de que se sucedan posibles accidentes.

La mayor cantidad de horas de sol es uno de los rasgos que definen al verano. Los deslumbramientos al volante provocados por el sol son un factor de riesgo que en muchos casos no se tienen en cuenta. El 20% de los conductores no usan este accesorio pese a que la DGT señala que el 5% de los accidentes se producen por deslumbramientos. Una de las mejores formas de combatir este problema es el uso de gafas de sol para proteger a nuestros ojos de sus rayos. Existen muchos tipos de marcas, modelos y tipos de gafas pero, ¿cuales son realmente aconsejables para poder conducir y cuales debemos evitar?

Lo primero que debemos saber es que la DGT afirma que no todas las gafas de sol están permitidas para conducir. Es decir, solo aquellas que cumplen con una serie de requisitos y que ayudan a reducir la fatiga visual, el riesgo de deslumbramiento y la ceguera temporal son realmente aptas para este proceso.

Tal y como indica el propio organismo, no se deben utilizar las gafas que tienen un filtro solar de nivel 4, es decir, aquellas que se utilizan para esquiar o en deportes de nieve, ya que son más oscuras y empeoran la visión del conductor. Pese a que el uso de estas gafas no está tipificado con ningún tipo de sanción, hay que ser conscientes de que sí empeoran la visión en la conducción. Por ello, la DGT recomienda usar gafas polarizadas y con un filtro solar de nivel 3 capaz de absorber entre el 81% y el 91% de los rayos ultravioleta. Desgranando todo esto, cabe resaltar las siguientes indicaciones:

En lo referente a la polarización, cabe resaltar que este tipo de gafas disponen de lentes base a las que se agrega una lámina que filtra los rayos de sol que caen en una determinada dirección. Es decir que eliminan los reflejos y neutralizan más eficazmente los deslumbramientos. Además, combaten mejor la fatiga ocular y proporcionan mayor nitidez y contraste. Asimismo, es importante destacar que es tipo de gafas suelen incluir la letra "P", ya sea en el interior o exterior de la varilla, o bien en los propios cristales.

Otro de los puntos importantes es el color de la lente. Atendiendo a las indicaciones de la DGT las ideales son las que los tienen verdes, grises o marrones. De las mismas, las más aconsejables son las de cristales marrones, ya que reducen el cansancio visual, no alteran las percepción de colores y se adecuan más eficazmente a zonas de luz y sombra.

El filtro solar es otro de los elementos a tener en cuenta. Desde la organización se recomienda el grado 3, ya que las de este nivel absorben entre el 81 y 91% de rayos UV (ultravioleta). Por el contrario, es preferible que no sean de filtro solar 4 (de hasta el 92 % UV), pues son más oscuras y adecuadas para otras actividades como esquiar o navegar.

Por último, pero no menos importante, es necesario hacer hincapié en la homologación. Este rasgo es una condición fundamental junto al hecho de contar con lentes adecuadas para no dañar la vista. Es por ello que lo más aconsejable es comprarlas o bien en ópticas o en tiendas autorizadas. Estas gafas siempre disponen de filtro UV y en la varilla registran la homologación de Conformidad Europea (CE), que certifica la calidad del mismo.