La entrevista que dieron los duques de Sussex ha dado la vuelta al mundo por la multitud de titulares que ha dejado. Entre otras muchas cosas, Meghan Markle le dijo a Oprah Winfrey durante la mediática entrevista que se emitió el pasado 3 de marzo que contrajo matrimonio con el Príncipe Harry tres días antes de la ceremonia oficial: "Nadie lo sabe. Pero llamamos al arzobispo de Canterbury y le dijimos: mira, este espectáculo, es para el mundo pero queremos nuestra unión entre nosotros".

Esta información que daba Markle ha sido desmentida por el propio arzobispo. Justin Welby indicó que él no ofició ninguna boda. Además, ha matizado que lo único que se produjo antes del enlace es "una conversación privada con la pareja en el jardín sobre el enlace, pero les puedo asegurar que no se celebró ninguna boda hasta el evento nacional televisado". La Iglesia de Inglaterra requiere de dos testigos para que cualquier boda sea válida y las ceremonias deben celebrarse en un lugar de culto certificado para que se puedan presentar, de igual modo, objeciones.

Por ello, las palabras de Meghan Markle han quedado desmentidas y han sido reprochadas tanto por el arzobispo como por los propios requerimientos que pone sobre la mesa la iglesia británica para que un enlace tenga validez.

La duquesa de Sussex también confesó en esta esperada entrevista que durante el tiempo que pasó con la familia real británica tuvo pensamientos suicidas, mientras que también, junto al príncipe Harry, ha denunciado racismo en la institución monárquica británica y ha hecho una comparación entre su situación y la de la princesa Diana. Markle también dijo sentirse "aislada, solitaria y carente de apoyo", algo que motivó sus pensamientos de acabar con su propia vida.

La cadena de televisión CBS ha abonado unos 5,8 millones de euros por la entrevista exclusiva de Oprah Winfrey a los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Enrique. Los derechos de emisión de esa entrevista de dos horas de duración, costaron entre 7 y 9 millones de dólares (entre 5,8 y 7,5 millones de euros al cambio).

El príncipe Harry aseguró que temía que ocurriese lo mismo que con su madre

Harry ha justificado la decisión de abandonar la Casa Real por miedo a que "la historia se repita", en referencia a su madre, la princesa Diana, y por la "falta de apoyo y comprensión", mientras que ha confesado sentirse atrapado "dentro del sistema", como también lo están su padre y su hermano, ha añadido.

También ha hecho referencia a la salida de la institución, en enero de 2020, y cómo fue "difícil y dolorosa", así como a la relación con su padre, el príncipe Carlos, con el que ha asegurado sentirse "muy decepcionado".