Decir que el pulpo es un molusco suena bastante raro, pero lo cierto es que lo es. Si nos preguntan diríamos sin dudar que es un cefalópodo, que también, de hecho su nombre completo es molusco cefalópodo octopodiformesunto, o lo que es lo mismo molusco cefalópodo con ocho brazos. Los pulpos son cefalópodos de cuerpo blando pero que no tienen esa reconocible y característica concha exterior de la mayoría de los moluscos. El único molusco cefalópodo que la tiene es el nautilo.

^Nautilo

Es más, el pulpo es un invertebrado que no solo carece de concha exterior, tampoco tiene un esqueto interior.

Lo cierto es que los cefalópodos, - como pulpos, calamares o sepias- evolucionaron de unos moluscos que se remontan a hace más de 500 millones de años.

El tercer apellido del pulpo 'octopodiformesunto' se refiere a sus ocho apéndices móviles que le permiten desplazarse por el agua y cazar a sus presas, ya que son carnívoros. Unos tentáculos que pueden medir hasta 4.5 metros, si bien hay alguno documentado de hasta 9 metros de longitud.

MOLUSCO, Y MUY INTELIGENTE

Los pulpos son animales solitarios y asociales, pero también dicen que son los moluscos más inteligentes .

Hay evidencias de que cuentan con un sistema que puede almacenar memoria tanto a corto como a largo plazo. Además existen estudios que indican que ejercen el aprendizaje por observación, son capaces en ocasiones de salir de sus acuarios y en otras de entrar en ellos en busca de alimento. Han logrado incluso acceder a barcos de pesca para comer cangrejos.

Pero si algo llama la atención de los pulpos es su enorme capacidad de camuflaje, que les resulta vital tanto para cazar como para evadirse de sus depredadores.

Además desde pequeños se tienen que buscar las habichuelas y desarrollar su instinto de superviviencia. Tras la fecundación, el padre abandona a la madre que a su vez cuida de los huevos hasta que eclosionan, si moverse apenas para conseguir alimento, lo que hace que en cuanto eclosionan, muera de hambre.

TIENEN TRES CORAZONES Y VARIOS CEREBROS

Dos de los corazones están encargados de llevar la sangre a las branquias y el otro lo hacia al resto del cuerpo. También cuentan con varios cerebros, algunos de los cuales se encargan de controlar sus ocho tentáculos.