El Gobierno de España vuelve a dar un paso adelante en la innovación. En esta ocasión con la creación de un nuevo órgano dedicado a la tan mencionada memoria histórica. Los miembros del Ejecutivo socialista han querido dejar constancia de la intención que desde hace varios años ya mantienen, recordar a las víctimas olvidadas de épocas pasadas.

Esta nueva Ley de la Memoria, tendrá como objetivo principal investigar las víctimas republicanas desaparecidas durante el siglo pasado en nuestro país, rescatar los recuerdos de aquellas personas a las que se les declaró la desaparición y de las que se desconoce el paradero.

Su objetivo es centrarse en "víctimas del golpe de Estado, de la guerra y la dictadura", en una ley en la que no menciona nada de los crímenes del bando republicano; aunque eso sí, consideran que esas personas están incluidas cuando se menciona la frase de “víctimas de la guerra”.

Desde el Gobierno consideran que “se ha honrado durante cuarenta años al franquismo, y ahora es el momento de hacer lo mismo con las víctimas del régimen”; y ese es el motivo principal por el que sale a la luz esta ley. Sin embargo, y al contrario de lo que pueda parecer, si un familiar de una persona asesinada por el bando republicano reclama su “derecho a la verdad”, está completamente en su derecho de realizarlo, aunque según dicen “esos casos son menos numerosos”.

Teniendo en cuenta la creación de esta ley, el Ejecutivo prevé la constitución de una Fiscalía dedicada expresamente a la Memoria Democrática. Del mismo modo, proponen que el 31 de octubre sea considerado como “Día de recuerdo y homenaje de todas las víctimas”. A pesar de todo, en la oposición todo apunta a que no estarán dispuestos a negociar sobre esta ley.

Una ley transversal

Desde el Gobierno, afirman que esta ley tendrá una importante amplitud de miras, que fácilmente abarcará todos los ámbitos de la vida, desde la economía hasta los títulos nobiliarios, pasando por la educación. En esta última con un hincapié especial, ya que los profesores recibirán contenidos e investigación sobre el tema para impartirlo a las generaciones venideras.

Además, y teniendo en cuenta los últimos antecedentes que se están viviendo, todo apunta que la ley será llevada al Congreso de los Diputados para ser sometida a la aprobación de la cámara. La previsión invita a que con o sin apoyos de los partidos de la derecha, la ley obtendrá el sí de la cámara, aunque eso sí, habrá que permanecer pendientes de los recursos de inconstitucionalidad, que según el Consejo General del Poder Judicial, “podría violar la libertad ideológica”.