Un sábado para usar la razón
La situación marcada por el coronavirus nos invita a usar la razón y el corazón de un modo diferente a como los habíamos usado hasta ahora

Un sábado para usar la razón
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Hoy la Iglesia Católica celebra el Sábado Santo, el día en el que Jesús de Nazaret reposó en el sepulcro. España vive una largo Sábado Santo desde que dio comienzo la pandemia con más de 15.000 muertos por el coronavirus en unas estadísticas que habrán de ser repasadas seguramente al alza.
Estamos en unos de esos momentos en los que la realidad, la más dura y la más objetiva, ha irrumpido en nuestra vida planteándonos preguntas que habíamos aplazado. Habíamos aplazado la pregunta sobre la muerte y la enfermedad. Y ahora esta largo Sábado Santo nos ha obligado a preguntarnos sobre la muerte, con dignidad, en silencio, como un gran deber cultural que habíamos rechazado.
Este largo Sábado Santo que vive España desde comienzos de marzo nos invita a usar la razón y el corazón de un modo diferente a como los habíamos usado hasta ahora. Ya no es posible detenerse en las apariencias. Ante los féretros en el Palacio de Hielo, ante las residencias de ancianos heridas por la devastación, ante el miedo y ante la destrucción de empleo, ante el sacrificio del confinamiento a todos se nos desafía a usar nuestra inteligencia y nuestro afecto de un modo diferente.
¿Hay algo capaz de darnos esperanza en este día oscuro del que no podemos huir? La sociedad española, que tantas energías tiene para la solidaridad, para cuidarse de los otros, no debería aplazar esta pregunta ni precipitarse en responderla. Es decisiva.



