Madrid - Publicado el - Actualizado
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La Audiencia Nacional ha decidido no aplicar medidas cautelares para los condenados por el caso de las tarjetas black. Ingresarán en prisión, si procede, cuando la sentencia sea firme. El Estado de Derecho tiene tasados los supuestos en los se puede recurrir a la prisión preventiva. Y en este caso no parecen darse. El abuso en beneficio personal de los fondos de una caja de ahorros puede provocar el deseo de un escarmiento público. Más aún cuando la caja ha tenido que ser rescatada con el dinero de todos los españoles Pero, afortunadamente, la justicia es otra cosa. La justicia establece garantías.En los últimos años se ha acrecentado la sensibilidad ante los casos de corrupción. La crisis nos ha hecho rechazar con más contundencia conductas inmorales y delictivas que afectan al dinero público. Y esta corriente es positiva, es evidente que nuestra democracia necesita regeneración.Pero los pendulazos son malos. Habrá que encontrar el punto medio entre la laxitud y las reacciones tardías, tan frecuentes en otro tiempo, y las reacciones desproporcionadas. Las garantías en favor del acusado no se pueden perder. Las decisiones políticas no se pueden producir simplemente por una investigación. La propuesta hecha por Ciudadanos en el Congreso, que exige la dimisión en el momento de la apertura de juicio oral, podría ser equilibrada. Lo importante es tener siempre el mismo criterio.