“Me ha despertado a las 2.45 pensando que tenía ladrones en casa, y he ido corriendo porque oía ruidos extraños”, ha contado a COPE desde Kamez el misionero español Laureano del Otero. Asegura que “mientras revisaba la casa y la iglesia, de repente vino el segundo terremoto, que es el gordo, el de 6.4, y ha sido terrible, las paredes parecían de goma, todo se movía, todo el mundo ha salido a la calle”. “Las dos ciudades que han sufrido más daños han sido Durres y Thumana, y nosotros estamos en medio de los dos lugares, explica el misionero redentorista. Kamez está situada a 20 kilómetros de Durres.

Laureano del Otero cuenta que allí no se ha caído ninguna casa, aunque en su edificio “hay desconchones y grietas, algo normal”. Señala que “los edificios aquí muchos son viejos y no tienen buena construcción”, y que “en Durres y Thumana ha muerto gente porque se han derrumbado las casas mientras estaban durmiendo, era un momento en el que todo el mundo estaba en casa”. De momento, “algunas carreteras están cortadas, han cerrado el aeropuerto durante algún tiempo, las autoridades están informando de lo que va sucediendo, de lo que van encontrando, y todavía hay réplicas”.

“La embajada de España se ha puesto en contacto conmigo, está controlando que todos los españoles estemos bien, y -por ahora- no hay noticias de nada grave”, dice este misionero, que ha hablado con otros religiosos españoles y con la gente de su parroquia.

Hasta ahora son 13 las personas que han perdido la vida y alrededor de 600 las heridas a causa del seísmo, que ha tenido su epicentro en el mar Adriático, a unos 40 kilómetros de Tirana, la capital de Albania. Ha durado aproximadamente 30 segundos. Equipos de rescate de los bomberos y del ejército albanés están intentando sacar de los escombros a los que están atrapados, utilizando las manos y excavadoras.