Sánchez viaja a Alemania para reunirse con Scholz y certificar su alianza con el proyecto del gasoducto Midcat

Pedro Sánchez viaja este martes a Alemania para reunirse con el canciller Olaf Sholz. Se trata de un encuentro que tiene lugar en medio de la crisis energética que se está viviendo en Europa con motivo de la guerra de Ucrania y que está obligando a todos los países a adoptar medidas de cara a los próximos meses. Este encuentro tiene lugar un día antes de que Gazprom vuelva a cortar el suministro de gas al centro de Europa por labores de mantenimiento. Un corte que, en principio, solo debería durar tres días.

La cita entre Sánchez y Scholz no se trata de una reunión bilateral. El presidente del Gobierno asiste a una reunión informal de la coalición semáforo en la que naturalmente se hablará del gasoducto Midcat y de la idea de un mercado común de la energía propuesta por Polonia y recién asumida por Alemania.

Horas antes de la llegada del presidente español a Berlín, Scholz se ha posicionado en su importante discurso programático en la Universidad Carolina de Praga a favor de un acuerdo vinculante para la reducción de la deuda de los países europeos. Ha dicho que debe ser un acuerdo vinculante, que permita el crecimiento, y que sea políticamente comunicable, y al mismo tiempo que permita a todos los países de la Unión Europea dominar la transformación económica a través de las inversiones

Los puntos clave de la reunión del Gobierno alemán a la que asiste Sánchez

Sánchez tendrá que dar su opinión al respecto en Meseberg, un palacio rural ubicado a media hora de Berlín en el que dos veces al año el Gobierno alemán se retira para trazar estrategias. En esta ocasión, durante dos días, el ejecutivo va a abordar la estrategia de seguridad nacional y los problemas de suministro energético derivados de la guerra en Ucrania.

El primer tema en el orden del día será la estrategia de seguridad nacional y aquí los ministros alemanes están interesados en escuchar a Sánchez, por qué España lleva 2 años de ventaja. Alemania quiere saber más de ese sistema contra la desinformación del general Miguel Ángel Ballesteros.

La cita tiene lugar en horas muy delicadas para el gobierno alemán, el gasoducto Nord Stream cierra a partir de este miércoles 31, tres días para tareas de mantenimiento, en teoría, y Berlín teme que Putin cierre definitivamente el grifo del gas con cualquier excusa. En este contexto, la presidencia checa de la Unión Europea ha convocado para el próximo día 9, en Bruselas, una reunión extraordinaria de los ministros de Energía para abordar la fuerte subida de los precios y una posible intervención política en los mercados, según ha anunciado este lunes el primer ministro checo, Peter Fiala.