Miles de personas -12.000 según los organizadores- pidieron este viernes en Viena que se tomen más medidas para luchar contra la crisis climática, dentro de una convocatoria global del movimiento Fridays for Future.

"En Viena han salido a la calle 12.000 personas para clamar por un cambio hacia energías sostenibles. Se necesita por fin un plan ecosocial para detener la espiral de la crisis causada por las energías fósiles", aseguró una de las portavoces de la marcha en la capital austríaca.

Este movimiento asegura que en las protestas celebradas en Austria, donde, además de Viena, se produjeron concentraciones en otras seis capitales regionales, reunieron un total de 20.000 personas.

En Viena los manifestantes marcharon por el centro de la ciudad, cerca de la zona donde se encuentran la sede del Gobierno y la Presidencia, lanzando proclamas a favor de la "justicia climática" y las energías alternativas.

El presidente de Austria, el ecologista Alexander Van der Bellen, mostró todo su apoyo a la protesta en un mensaje en Twitter en el que pidió adoptar políticas que luchen contra la crisis climática y dejar un mundo habitable para las futuras generaciones.