La desaparición de Madeleine McCann en mayo de 2007 continúa siendo una de las mayores incógnitas de las policías de Portugal y el Reino Unido, que aún no han sido capaces de desentrañar qué pasó con aquella niña de 4 años aquella noche. 

Pero una nueva pista ha reabierto la investigación y, por primera vez en muchos años, los investigadores están más cerca de descubrir qué pasó con Madeleine. 

Según informa 'The Sun', todas las miradas están puestas en el pederasta y asesino en serie alemán Martin Ney, encarcelado desde 2012 en su país. Martin Ney está condenado por asesinar a tres menores (Stefan Jahr, de 13 años; Dennis Rostel, de 8; y Dennis Klein, de 9 años) y abusar sexualmente de más de 40. Este asesino, conocido como el hombre enmascarado por su ritual de utilizar una máscara de cuero negro para cometer sus crímenes, es uno de los peores criminales de la historia de Alemania.

En 1992 comenzó a asaltar a niños en internados y campamentos de verano en los que se colaba disfrazado con un traje de cuero negro. Más tarde, comenzó a realizar estos ataques en residencias privadas. Además de los tres asesinatos por los que está condenado en Alemania, Ney es sospechoso de otros dos cometidos en Francia y en los Países Bajos.

Madeleine, que en ese momento tenía 3 años, desapareció mientras dormía junto a sus hermanos gemelos en un apartamento que sus padres habían alquilado en Praia da Luz, en el sur de Portugal. Sus progenitores se encontraban cenando junto a unos amigos en un restaurante cercano.

En el momento en el que se produjo la desaparición de Madeleine, Martin Ney se encontraba en Portugal trabajando en un proyecto para gente sin hogar. Una zona que conocía bien, ya que Ney había viajado frecuentemente al Algarve en los años 90. Además, el retrato robot del sospechoso al que varios testigos vieron merodeando por la zona antes del crimen se parece bastante a la fotografía de Ney.

La policía investiga también el historial de navegación del asesino en aquellas fechas. En uno de sus mensajes online usando el pseudónimo GerdX aseguraba: "He comprado un traje de camuflaje para esconderme en los arbustos y poder asaltar a un niño guapo si pasa por delante".

Martin Ney ya fue investigado por Scotland Yard en 2011, pero en aquel momento se descartó su autoría, ya que hasta entonces sus víctimas habían sido varones. Pero nuevas pistas han vuelto a poner en foco sobre este terrible asesino.

Ney permanece encarcelado en Alemania con una condena de por vida por los tres asesinatos y más de 40 abusos sexuales a menores que ha confesado hasta la fecha, aunque se sospecha que podría estar detrás de más crímenes que aún no haya admitido.