Si algo caracteriza a los grandes acuerdos que se adoptan en la Unión Europea es que siempre los líderes buscan que sean de madrugada y después de muchas horas de duras negociaciones. De esta manera le imprimen algo de solemnidad a una serie de decisiones que muchas veces no se acaban de entender en las capitales europeas.

Hoy Bruselas se vuelve a llenar de policías, coches oficiales y mucho personal encorbatado para tratar de encontrar de una vez los nombres de los altos cargos que dirigirán la Unión Europea en los próximos cinco años.

Las posiciones están bastante distantes pero parece que hoy se están poniendo nombres encima de la mesa. El holandés Frans Timmermans podría convertirse en el próximo presidente de la Comisión Europea. Por primera vez en los últimos quince años un socialista ocuparía la plaza más importante de la Unión Europea. Además, fuentes comunitarias aseguran que el alemán y miembro del Partido Popular Europeo Manfred Weber se convertiría el presidente del Parlamento.

Quedaría por elegir al presidente del consejo que caería en manos de los liberales y la alta representante de política exterior que también sería para alguien del PP Europeo. De todas formas todo esto son especulaciones después de las últimas reuniones que han mantenido los líderes europeos, de todas formas, la última palabra la conoceremos esta madrugada después de varias horas de negociaciones.

Este próximo martes se constituye el Parlamento Europeo y para entonces quieren tener elegido a un Presidente de la Institución. Ahora solo falta ver si será solo una intensa noche de negociaciones o por el contrario se alarga la mañana del lunes.