El canciller austriaco, Sebastian Kurz, ha anunciado este sábado cuatro semanas de cierre de actividades no esenciales que comenzará este martes a las 24.00 horas y durará durante el resto del mes de noviembre con la intención de atajar los contagios de coronavirus.

"Desde la medianoche del martes, 3 de noviembre, y hasta que termine el mes de noviembre habrá un segundo cierre en Austria", ha anunciado Kurz en comparecencia pública.

La medida incluye un toque de queda entre las 20.00 y las 6.00 horas durante el cual solo se podrá salir del domicilio por causa justificada. Cerrarán las actividades de ocio y culturales y los únicos eventos autorizados serán los funerales. Igualmente se restringen las reuniones privadas limitando los encuentros a los convivientes de dos hogares.

"Es necesario tomar medidas para evitar una sobrecarga de las unidades de cuidados intensivos", ha explicado Kurz. La medida será presentada y votada este domingo en el Parlamento.

Estas restricciones vienen acompañadas de un paquete de ayudas para las empresas afectadas, que recibirán un 80 por ciento de sus ingresos declarados en el mismo periodo del año anterior.

También tendrán prohibido el funcionamiento los locales de alojamiento como los hoteles y los eventos deportivos podrán continuar celebrándose, aunque sin público. El deporte solo se permite en exteriores y siempre que no haya contacto físico. Los comercios minoristas, los centros educativos y actividades como las peluquerías podrán continuar abiertas, aunque con restricciones.

En el sector educativo seguirán abiertos los tramos de educación infantil y de educación primaria, mientras que secundaria y universidades tendrán que funcionar a distancia.

Este sábado las autoridades han informado de 5.349 casos nuevos y 27 decesos en las últimas 24 horas. En total Austria suma 104.925 casos y 1.109 muertes. Hay 1.867 pacientes hospitalizados, 265 de los cuales están en unidades de cuidados intensivos.