El comisario de los Mossos d'Esquadra Ferran López ha asegurado este jueves que ni el mayor Josep Lluis Trapero, ni él mismo, ni ningún mando de la Prefectura del cuerpo policial autonómico expresó nunca su apoyo al proceso soberanista en Cataluña.

"No es un tema que nos interese", ha zanjado López en su segunda jornada de declaración como testigo en el juicio de la Audiencia Nacional a la cúpula de los Mossos por su actuación en el 1-O, con el mayor Trapero como principal acusado.

El testigo, que fue número dos de Trapero, ha explicado, a preguntas de la letrada del acusado, Olga Tubau, que ni el mayor ni ningún mando manifestaron nunca algún tipo de simpatía ideológica con quienes defienden la independencia de Cataluña. No lo hicieron ni antes, ni durante los días que rodearon al 1-O ni después, ha añadido.

También a preguntas de la defensa, López ha explicado que fue el propio Trapero quien desde el mismo día 1 dejó claro que todas las acciones individuales de los mossos que se situaran al margen de las pautas de actuación dictadas y basadas en el auto judicial para impedir la consulta, el agente en cuestión tendría que asumir su responsabilidad.

Ese fue siempre el discurso de Trapero y de los mandos, ha resaltado el testigo antes de lamentar que se hubieran producido más actuaciones irregulares de las deseadas, aunque no muchas.

La Prefectura, a instancias de Trapero, abrió una información reservada el mismo día 3 de octubre y el propio Ferran López pidió a los jefes de región del cuerpo policial que le hicieran llegar las actuaciones de agentes que ellos consideraran que habían sido irregulares.