El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha confirmado este domingo que su gabinete de seguridad aprobará en una semana la llamada ley de deducciones, para retener de los impuestos y aranceles recaudados para la Autoridad Palestina (ANP) lo que se paga a presos y a las familias de terroristas muertos.

"Que no quepa duda de que Israel deducirá el dinero que la Autoridad Palestina paga a los terroristas y sus familias de los impuestos y aranceles que cobra mensualmente en nombre de la Autoridad Palestina y las transferencias a (la sede del Gobierno palestino en) Ramala", ha afirmado.

"Al final de la semana, el personal completará el trabajo necesario para implementar la ley sobre la deducción de sueldos de los terroristas. El próximo domingo me reuniré con el gabinete de seguridad y aprobaremos la decisión necesaria para deducir los fondos", ha añadido Netanyahu en comentarios recogidos por el 'Jerusalem Post'.

La ley correspondiente aprobada por la Knesset (el Parlamento israelí) a principios de julio pasado, estipula que el Ministerio de Defensa remitirá cada año al gabinete de seguridad un informe en el cual se resumirá el traspaso de fondos de la ANP a presos y sus familias. La suma se dividirá por 12 y el resultado se restará de los fondos de la AP recogidos por Israel.

La Autoridad Palestina ha reconocido que su presupuesto anual para estos pagos, tanto en 2017 como en 2018, fue de unos 290 millones de euros pero ha avisado de que si Israel deduce los fondos, no aceptará nada del dinero que Israel le transfiere según los términos de los Acuerdos de Oslo, es decir, unos 100 millones de dólares al mes.

"Cualquier deducción de estos ingresos no es más que una continuación de la piratería israelí contra miles de millones de dólares que Israel ha robado", ha hecho saber la Autoridad Palestina en un comunicado. "Esto también es una violación clara y flagrante de las obligaciones israelíes de conformidad con los acuerdos firmados, especialmente el Protocolo Económico de París", ha añadido.