El expresidente de la Generalitat Artur Mas ha presentado su piso como garantía para cubrir parte de las fianzas que le reclama el Tribunal de Cuentas por la promoción en el exterior del proceso soberanista, después de que el tribunal no haya aceptado los avales presentados por la Generalitat.
Lo ha anunciado en una rueda de prensa desde los jardines del Palau Robert de Barcelona, en la que ha reconocido, no obstante, que no tiene la certeza de que el tribunal vaya a aceptar un bien inmueble como garantía: "Por eso estamos en la intemperie".
Los avales ahora rechazados cubrían la responsabilidad contable de 28 personas, entre ellas Mas y el expresidente Carles Puigdemont, el exvicepresident Oriol Junqueras o los exconsellers Raül Romeva, Francesc Homs o Andreu Mas-Colell.
El Tribunal de Cuentas rechaza los avales al interpretar que la ley no permite dar cobertura pública al patrimonio privado de las personas al servicio de la Administración "que hubieran obrado con dolo, o culpa o negligencia grave en la generación del daño, sea este ocasionado a aquella o a terceros".
Con todo, Mas ha explicado que si el Tribunal de Cuentas acepta los bienes inmuebles de los encausados como garantía, estos serían suficientes para cubrir las fianzas que se les reclama.
Y ha añadido que, como "plan b", por si finalmente el tribunal no aceptaba los avales de la Generalitat, a finales del mes de junio volvieron a tasar los pisos para entregarlos como garantía.