El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha lanzado un mensaje no exento de sorna al vicepresidente Pablo Iglesias, después de que el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón haya solicitado al Tribunal Supremo que investigue al líder de Podemos.

El juez considera que hay indicios de que Iglesias haya cometido tres delitos en relación con la tarjeta de memoria del móvil de su exasesora Dina Bousselham, una tarjeta que contenía, entre otras cosas, imágenes íntimas de su exasesora, y que Iglesias mantuvo en su poder durante meses, en lugar de entregársela a su dueña.

Posteriormente, y siempre según el auto del juez García-Castellón, Iglesias pactó con el equipo jurídico de Podemos acusar al comisario Villarejo de haber sustraído la tarjeta y de haber filtrado al digital OKDiario parte del contenido de la misma, con el fin de sacar rédito electoral de esta supuesta conspiración del Estado contra su persona.

El mensaje de Martínez-Almeida sobre el 'punto G' de Pablo Iglesias

Ante toda esta polémica, el alcalde de Madrid, con el sentido del humor que le caracteriza, ha lanzado este mensaje a Pablo Iglesias, recordando el 'punto G' del vicepresidente del Gobierno.

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Señor @PabloIglesias , le recuerdo su punto G. pic.twitter.com/13TbQuI01v

— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) October 7, 2020

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Ese punto G al que se refiere Martínez-Almeida es una parte del Código Ético de Podemos en el que explica cómo debe actuar un cargo público del partido si resulta imputado:

“El compromiso de renuncia al cargo público, interno del partido o a cualquier candidatura a tales cargos en caso de ser imputado, procesado o condenado por las faltas y delitos que se determinarán en el reglamento al efecto que habrá de publicar la Comisión de Derechos y Garantías, y que en cualquier caso incluirán siempre los delitos de corrupción, los económicos, el acoso sexual, la violencia machista, la pederastia y el maltrato infantil, así como los delitos contra los derechos de los trabajadores, los ecológicos y los urbanísticos”.

Veremos si Iglesias cumple con el Código Ético del partido que lidera y si, en el caso de no hacerlo, el partido se atreve a actuar contra él.