La cifra de fallecidos que deja este mes de febrero respecto a la pandemia es de récord, situándose en la más alta, solo por detrás de la registrada el pasado mes de abril. La próxima actualización de datos será el próximo lunes 1 de marzo, por lo que ya se puede empezar a sacar conclusiones sobre el balance que en estas últimas cuatro semanas nos ha dejado la covid-19 en nuestro país.

Las defunciones en este segundo mes del año 2021 se sitúan en 10.823, mientras que en abril fallecieron 15.672. Estos datos nos muestran los duros efectos de la tercera ola, que desde el pasado mes de enero ha provocado importantes cifras de contagios y fallecidos. Estos datos se registran de forma similar en todos los procesos epidemiológicos: primero crecen los contagios, luego los ingresos, después los ingresados en UCI y por último el número de fallecidos. También, los datos registrados en febrero, en plena tercera ola, supera a su mes homólogo en la segunda ola: el mes de noviembre, cuando se registraron 9.191 defunciones.

El INE registra más de 100.000 fallecidos en España

Este año arrancó de forma paralela a la tercera ola tras las fiestas navideñas. En la primera semana del año se registró un exceso de mortalidad que se situó en 1.976 personas, la semana siguiente esta cifra asciende hasta los 2.729 fallecidos y el pico se registra en la tercera semana con un 3.300 fallecidos por coronavirus.

Hasta el final de la semana seis, la última respecto a la que el INE ha publicado datos, se han producido 13.53 fallecidos a causa de la pandemia. Si se suman a los registrados en 2020. La cifra total de fallecidos en España, hasta el 14 de febrero, se sitúa ya en 99.715.

Precaución ante el descenso de los datos

En este sentido, el mes de marzo comenzará con una mejoría en todos los parámetros epidemiológicos, que volverán a ponerse a prueba a través de diferentes escenarios en las próximas semanas. Por ello, los expertos piden a los ciudadanos que no se relaje la situación ante la mejoría de los datos, y que se sigan respetando todas las medidas de seguridad y restricciones impuestas para poder mantener una situación de incidencia baja, mientras el ritmo de vacunación sigue aumentando en nuestro país.

En cualquier caso, la pandemia sigue en fase de descenso en todo el país. Por ello, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha hecho una llamada a la prudencia para mantener la tendencia a la baja: "En la evolución de la pandemia se ha observado un descenso muy rápido en la incidencia en las últimas cuatro semanas. Esta rápida bajada ha sido desigual y se aprecia una reducción en la velocidad del descenso. El descenso medio por día es del 7%, pero es varía en función de la comunidad".

Por otra parte, febrero cierra con una situación relativamente tensa en hospitales, por lo que existe miedo ante un posible repunte que provoque cierta saturación en nuestro sistema sanitario. En este sentido, el 30% de las camas de cuidados intensivos en todo el país siguen ocupadas por pacientes covid, y en otras regiones como Madrid, Cataluña y Castilla y León este dato se sitúa alrededor del 40%.