Las entidades sociales catalanas integradas en la federación ECAS han pedido este sábado que la Comisión Bilateral Estado-Generalitat, que se reunirá el lunes, estudie la "armonización" e importe del Ingreso Mínimo Vital (IMV), competencia del Ejecutivo central, y la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC), que gestiona el Govern.

En un comunicado, la federación Entidades Catalanas de Acción Social indica que armonizar el pago de ambas prestaciones aseguraría "unos ingresos mínimos a la población vulnerable", lo que, a su entender, "ha de ser prioritario en el diálogo Estado-Generalitat".

Recuerda que un 26,3 por ciento de la población está en riesgo de pobreza o exclusión en Cataluña, donde el Ingreso Mínimo Vital llega a 16.200 hogares, un 11 por ciento de los que han pedido esta prestación.

"El colapso administrativo y la ineficaz coordinación para garantizar el encaje entre el IMV y la RGC continúan generando desamparo y confusión", destaca la entidad, que entiende que "hace falta una ventanilla única y una gestión ágil para dar respuesta a las necesidades básicas de los hogares".

ECAS explica que, en los contactos con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y el Departamento de Derechos Sociales de la Generalitat, ha podido constatar "las discrepancias entre los gobiernos español y catalán en el enfoque a la hora de armonizar las ayudas".