La secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, comparece este martes a las 9.30 horas en la Comisión de Investigación sobre la presunta financiación ilegal del PP menos de una semana después de la sentencia por el caso Gürtel, menos de 24 horas después del decreto de prisión incondicional para Luis Bárcenas, y con la moción de censura presentada por el PSOE sobre la mesa.

Con Cospedal, la Comisión de Investigación cierra una nueva ronda de comparecencias en relación con la financiación del PP, a la espera de que sea llamada la exministra Ana Mato, cuya comparecencia fue aplazada hace unas semanas por enfermedad.

Han pasado por el Congreso los expresidentes de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre, Ignacio González o Cristina Cifuentes, dirigentes del PP madrileño como Francisco Granados y empresarios relacionados con las tramas de corrupción que afectan al partido.

El último en desfilar el pasado 8 de mayo por la comisión ha sido el exalcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid) y exmarido de Ana Mato, Jesús Sepúlveda, condenado el pasado jueves a 14 años de cárcel, quien se negó a contestar a las preguntas sobre la presunta financiación irregular del PP al estar inmerso en un proceso judicial que estaba aún pendiente de sentencia.

Sí habló en su paso por la comisión el empresario Álvaro Pérez, El Bigotes, colaborador del condenado Francisco Correa. Pérez se preguntó por qué Ignacio López del Hierro, marido de María Dolores de Cospedal, y el exgerente del PP gallego Ángel Piñeiro, "amigo del señor Rajoy", nunca han declarado por los papeles de Bárcenas cuando, según su versión, ellos sí aparecen en las anotaciones y "soltaban el mondongo".

Cospedal tendrá que responder el martes a estas acusaciones y a la propia sentencia sobre el caso Gürtel conocida el pasado jueves y que ha precipitado una moción de censura del PSOE contra el Gobierno de Mariano Rajoy.

En la sentencia, dictada nueve años después de que estallara el caso, la Audiencia Nacional condena a 33 años de prisión al extesorero del PP Luis Bárcenas, y al propio PP por lucrarse de los beneficios de la red de Francisco Correa, sobre el que ha recaído la máxima pena, 51 años de cárcel.

Según la resolución judicial, la red Gürtel tejió "una estructura de colaboración estable con el PP" para la prestación de servicios y, "en paralelo", creó "un auténtico y eficaz sistema de corrupción institucional a través de mecanismos de manipulación de la contratación pública central, autonómica y local".