El confinamiento de Castilla y León finalmente ha entrado en vigor a las 20.00 de la tarde y no a las 22:00,como quería el ministro de Sanidad, Salvador Illa. De esta forma el Ejecutivo regional ha incumplido la orden que había dado el candidato para las elecciones catalanas quien este mismo sábado había pedido que fuese a las 22:00 tal y como se había acordado en el Consejo Interterritorial de Salud y se recoge en la ley de estado de alarma.

Sin embargo, la sorpresa que el ministro no se esperaba es que la Delegación del Gobierno ha decidido no enfrentarse a la Junta y poner las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a la orden dictada por esta administración.

Los castellanoleoneses, de esta forma, han tenido que regresar a sus domicilios a las 20:00 de la tarde y no podrán salir hasta 06:00 de la mañana. Lo han hecho en un ambiente de incertidumbre. Así lo han trasladado los agentes que han comunicado a los vecinos la decisión los medios de comunicación, que en esta primera jornada han explicado que su labor era meramente informativa y no han multado a nadie.

Artículo 10 del Estado de Alarma

Desde el Ejecutivo de Fernández Mañueco entienden que no están haciendo nada que no esté permitido. Según el informe elaborado por los servicios jurídicos de la Junta, la decisión de adelantar la orden la avala el artículo 10 del estado de alarma. En concreto, se acogen a que está permitido "modular, flexibilizar y suspender" la limitación de libertad de circulación de las personas siempre que sea "en horario nocturno".

Según los servicios jurídicos "modular" es "modificar los factores que intervienen en un proceso para obtener distintos resultados". De esa forma, Mañueco, o, "como autoridad delegada en Castilla y León", tras la prórroga del actual estado de alarma, "tiene la facultad de ampliar o restringir dicha libertad en horario nocturno". Algo que no ha defendido el ministro, aunque se ha abierto a estudiar la petición de una petición que han hecho diversas administraciones regionales.

Cierre perimetral y reuniones de cuatro personas

A las 20:00 ha entrado en vigor la limitación de la entrada y salida de personas del territorio de cada una de las provincias de Castilla y León, salvo para todos aquellos desplazamientos, adecuadamente justificados, que se produzcan por alguno de los motivos exceptuados.

Se ha limitado también la permanencia de grupos de personas en espacios públicos y privados a un número máximo de cuatro personas, salvo que se trate de convivientes, lo que se espera reduzca de manera muy significativa la movilidad e interacción social. Esta medida no afecta a la confluencia de personas en instalaciones y establecimientos abiertos al público que cuenten con un régimen específico de medidas de prevención y control aprobado por la autoridad sanitaria, ni tampoco a las actividades laborales e institucionales.

En este sentido, también se ha reducido en toda Castilla y León el aforo para las reuniones, celebraciones y encuentros religiosos, de manera que no se supere un tercio de su aforo, con un máximo de 25 personas. Estas medidas que evaluarán cada 15 días para garantizar su adecuación a la evolución de indicadores.