Los socialistas asumen que el 28-M puede depararles amargas sorpresas, aun cuando Ferraz reivindica su olfato en la calle y busca sofocar sus dificultades de conservar La Rioja, Aragón y Baleares, además de mantener en el aire la icónica Comunidad Valenciana, entre otros territorios pendientes del comportamiento de Podemos. La reunificación del centro-derecha lleva a federaciones a arrastrar el miedo en el cuerpo ante la posibilidad de vuelcos en una foto final por la suma del PP de la mano de Vox.

Esa carambola ya paso en Andalucía en 2018 y además resultó un bofetón imprevisto. El aviso se deja sentir en feudos cuyas certidumbres se diluyen frente a La Moncloa, dada a recalcar el poderío de su maquinaria en marcha, a pesar de acumular plazas clave donde la pugna estaría ajustada o el retroceso en votos resulta ya significativo. En COPE te contamos como los expertos y politólogos tienen claro que se va a producir un “cambio de ciclo” en el que los puntos calientes están en las nueve Comunidades Autónomas gobernadas ahora por los socialistas.

El promedio de los sondeos de opinión de intención de votos señalan un retroceso de la izquierda en todo el país, aunque el partido que dirige Alberto Núñez Feijóo necesitará contar con VOX si quiere recuperar gobiernos autonómicos que ahora están en manos del partido que lidera Pedro Sánchez. En este sentido, todas las miradas están puestas en las CCAA en las que gobierna el PSOE tras la cita electoral de 2019, como Extremadura, Asturias y Castilla-La Mancha. También está gobernando gracias a coaliciones en Navarra, La Rioja, Comunidad Valenciana, Aragón, Baleares y Canarias.

El retroceso

Hasta el momento señalan posibilidades de pasar a manos del PP en el caso de La Rioja (con los de Feijóo al borde la mayoría absoluta), Comunidad Valenciana (sumando los votos de Vox), Aragón (con los votos de Vox y a la espera de lo que haga Aragón Existe y Castilla La Mancha (aunque el PSOE tendría mayoría, se podría ver superado por la suma de PP y Vox). El PSOE podría seguir gobernando en Extremadura pero necesitaría a Unidas Podemos para hacerlo, igual que le ocurre a los socialistas en Asturias. El color del gobierno de Navarra dependerá de si el PSOE acepta a EH Bildu y Geroa Bai en el ejecutivo, aunque UPN sea el que obtendría mayoría.

Con este panorama demoscópico, fuentes del PSOE reconocen en COPE que se centran en "mantener los bastiones que están en disputa y prácticamente hemos abandonado la posibilidad de recuperar los dos que gobierna el PP y que se presentan a estas elecciones". La conclusión que expone el profesor Martín Merchán es que "el PSOE es el que tiene más que perder en estas elecciones", pero "si las mantiene es fundamental la gestión que haga el PP de las expectativas o el PSOE se consolidará como la fuerza política de la estabilidad".