El lenguaje verbal es importante pero el gestual, y los políticos lo saben, también lo es. Está vinculado al estado emocional de una persona y aunque por costumbre apoye al lenguaje verbal, en ocasiones puede llegar incluso a contradecirlo. Llevado a un terreno político, los gestos dicen mucho de los diferentes líderes. Y ellos lo saben. Por eso algunos parecen estar estudiados al milímetro y cuadrados perfectamente en su comunicación. Pero ¿hasta dónde pueden los políticos controlar sus gestos?

Muchos expertos coinciden en que 'pueden hacerlo, pero hasta cierto punto'. "Pueden controlar algunos de sus gestos si se entrenan para ello, otros son inconscientes y por tanto imposibles de corregir", explica a cope.es el psicólogo, Sergio García Soriano, coordinador del grupo de Psicología, Comunicación y Política del Colegio Oficial de Psicólogos.  Los políticos controlan al milímetro sus discursos, su vestimenta para cada ocasión y su estilismo, pero dominar al cien por cien los gestos que a priori salen de manera inconsciente, es todo un reto. 

En este sentido, en  las apariciones públicas de los principales líderes, hemos comprobado que en cada uno de ellos se repite  una gesticulación con sus manos que hemos analizado con la ayuda de García Soriano: