El Gobierno comienza este jueves a negociar con patronal y sindicatos el alza del salario mínimo para 2024 con posturas alejadas, ya que los empresarios proponen un 3 % que los representantes de los trabajadores ven insuficiente para compensar la pérdida de poder adquisitivo.

CEOE-Cepyme acude a la reunión convocada a las 16:00 horas con las cartas sobre la mesa, planteando una subida del salario mínimo interprofesional (SMI) del 3 % para 2024, a la que se sumaría a otro 3 % para el año siguiente, en línea con lo pactado con los sindicatos en el acuerdo para el empleo y la negociación colectiva (AENC).

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ya dijo la semana pasada que el incremento debía mantener el poder adquisitivo y subir en línea con la media del IPC entre diciembre de 2022 y noviembre de este año, una tasa que según el dato adelantado publicado este miércoles se situaría en el 3,8 %.

Los sindicatos, por su parte, aún no han detallado cuál debería ser el SMI el próximo año para que represente el 60 % del salario medio, si bien han asegurado que la subida debería reflejar no sólo la tasa de inflación media, sino la de los productos básicos, como la alimentación, mucho más elevada.

Aunque fijar el salario mínimo es potestad del Gobierno previa consulta a los agentes sociales, Díaz ha dejado clara ya su intención de pactar con patronal y sindicatos esa subida del SMI, que en 2023 se elevó un 8 %, hasta los 1.080 euros mensuales en catorce pagas.

En esta ocasión la subida del SMI no parece que vaya a esperar a un nuevo informe del grupo de expertos que Trabajo creó para calcular cuál debería ser ese SMI para llegar a representar el 60 % del salario medio y evaluar el impacto de estos incrementos en el mercado laboral.