El pánico anti-diésel ha llegado a las empresas de automóviles y también a los clientes tras el anuncio del Gobierno de querer que en 2040 no circulen en España coches de gasolina ni diésel.

Pero hasta 2040 todavía faltan más de dos décadas todavía, por lo que habrá usuarios que seguirán teniendo en mente un coche diésel en lugar de los eléctricos que se pretenden implantar. ¿Tiene sentido adquirir un coche diésel ahora después del anuncio del Ejectivo?

La patronal de las empresas de venta de automóviles, Faconauto, ha sacado un argumentario sobre el diésel que defiende las virtudes de este tipo de coches, mayoritario entre los conductores españoles.

Aunque antes de este argumentario, hay algunos datos objetivos que pueden inclinar la balanza a favor comprar este tipo de coches todavía: la vída útil de un coche.

Esta vida útil suele depender del kilometraje que pueda soportar el coche. Los motores están proyectados para un vida útil de 250.000 kilómetros, pero a esto hay que añadirle el desgaste que sufren las piezas, por lo que no se garantiza un rendimiento al cien por cien para esta cantidad de kilómetros.

En cuanto al tiempo, la vida media de un vehículo ronda entre los 12 y 14 años, por lo que en este sentido, sería tiempo suficientes antes de que llegue la prohibición en 2040. Aunque esto no quiere decir que haya vehículos que duren por encima de las dos décadas.

Estos son dos puntos claves para pensar si es conveniente adquirir este tipo de vehículos. Pero luego hay algunas claves a tener en cuenta como el ajuste a algunas normativas. En este sentido, Faconauto aclara que “el diésel que se comercializa en la actualidad cumple con la última normativa sobre emisiones contaminantes de la Unión Europea”, por lo que “cumple los límites de emisionesen condiciones reales de circulación”.

Además, también recuerda Faconauto que “las restricciones de circulación de los vehículos diésel en las zonas centrales de las grandes ciudades, principalmente Madrid y Barcelona, afectarán únicamente a los que tienen más años (12 años, por ejemplo, en el caso de Madrid)”.

Si se aprueba una subida del impuesto del diésel, el precio de este se equiparará al de la gasolina, por lo que en este sentido tampoco estaría en desventaja. Y hay que recordar que además este tipo de motores consumen un 25% menos que los motores de gasolina.

Además, los motores diésel mantienen dos de sus características que lo han convertido en el mayoritario en las carreteras españolas: la fiabilidad y la durabilidad. Las mejoras llevadas a cabo para reducir emisiones tóxicas no han mermado estas dos virtudes de este tipo de coches.