La incertidumbre económica ha reavivado el fantasma del desempleo. A pesar de la última reforma laboral que ha puesto el foco en acabar con la temporalidad, los trabajadores españoles tienen la percepción de que se mueven en un inestable mercado de trabajo.

El 56% teme ser despedido, según el estudio de Randstad Workmonitores, es el porcentaje más alto de la Unión Europea, estamos 19 puntos porcentuales por encima de la media y muy alejados de países de nuestro entorno como Italia, con un 34%, o Reino Unido (28%) y Francia (24%) donde ese miedo se sitúa en la mitad. Si abrimos abanico geográfico, nos supera India, (70%), México (61%), Argentina y Brasil (ambos con el 60%).

Sólo 43% confía en encontrar empleo en breve

Los españoles se encuentran también entre los más pesimistas de Europa a la hora de hallar un empleo con cierta rapidez. Solo un 43% confía en ello y esto son 7 puntos porcentuales por debajo de la media. Más optimistas se muestran los trabajadores de Países Bajos (58%), Alemania (52%) o el Reino Unido (47%).

Se aleja la temida recesión, pero se enfría la actividad económica y esto lo perciben los trabajadores con inquietud. En las últimas semanas, sectores líderes de actividad como el tecnológico han realizado agresivos ajustes de plantilla con miles de despidos en todo el mundo y en un país como España en el que se valora especialmente la estabilidad, así lo reconoce un 94% de los españoles, la zozobra está servida. La preocupación por la incertidumbre económica y su efecto en los niveles de empleo se dispara al 73% cuando la media internacional se sitúa en un 54%.

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— COPE (@COPE) January 29, 2023

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Esto ocurre porque en nuestro país, según Pilar Llácer, experta en RRHH y autora del libro “Te van a despedir y lo sabes”, pesa mucho la tradición y la mentalidad “el mercado de trabajo se ha globalizado y es similar en todos los países, lo que cambia es cómo se prepara una persona y como se enfrenta a los cambios”, los españoles “tenemos cultura de permanecer en una compañía a lo largo de nuestra vida profesional y las empresas no tienen bien visto varios cambios de trabajo”. Nada que ver, por ejemplo, con Estados Unidos.

Cómo estar preparado

Es muy complicado estar preparado para un despido, pero el pesimismo es menor si ampliamos nuestra capacidad de empleabilidad. “Muchas personas piensan en el viernes, el día en que despiden las compañías en lugar de preocuparse de que lo que hay que hacer es tener una fuerte marca personal y saber cuáles son las empresas y los sectores en los que nos podrían contratar pasado mañana” en definitiva, anticiparse a lo que pueda pasar y tener una formación continua.

“Por muy bien que trabajes, por mucho que produzcas, si la empresa cambia sus objetivos o varía el entorno económico, pueden prescindir de personal” nada alentador desde luego, pero “será más fácil si nos hemos preparado para lo que el mercado demanda”.