La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha dicho que el 56 % de la cogeneración instalada en España ya ha renunciado temporalmente a su retribución regulada para acogerse al mecanismo ibérico que limita el precio del gas para generación eléctrica.

Así lo ha avanzado en la convalidación del real decreto-ley por el que se reduce el IVA del gas del 21 % al 5 %, que celebra este jueves el Congreso, donde ha destacado la importancia de este sector, "que produce calor y electricidad de manera simultánea y, por tanto, es más eficiente que otros procesos".

La ministra ha pedido el apoyo de todos los grupos parlamentarios a este decreto, que establece que las plantas de cogeneración puedan renunciar temporalmente a su retribución regulada y operar en el mercado eléctrico del mismo modo que las centrales de ciclo combinado con arreglo al mecanismo ibérico.

El objetivo, ha señalado, es que "al menos la mitad del parque de cogeneración vuelva a funcionar con normalidad", después de que una proporción similar se viera obligada a parar este verano.

Por el momento, desde el pasado 1 de octubre ha renunciado temporalmente al régimen retributivo acogiéndose a la nueva opción el 56 % de la cogeneración instalada, de acuerdo con los datos proporcionados por la ministra.

"En momentos complejos como éste es capital dar apoyo a la cogeneración, presente en sectores como pasta y papel, cerámica y agroindustria", ha recalcado.

Ribera se ha referido, asimismo, al Servicio de Respuesta Activa a la Demanda, medida con la que el Ejecutivo busca aumentar la flexibilidad para la industria y la seguridad del sistema eléctrico con una herramienta "muy parecida" al histórico mecanismo de interrumpibilidad.

En concreto, ha explicado, se trata de retribuir la disponibilidad de las plantas industriales que, con 15 minutos de antelación, puedan reducir su consumo eléctrico durante un periodo máximo de 3 horas.

El operador, Red Eléctrica, se encarga del instrumento con un nuevo servicio a través de subastas en las que pueden participar todas las unidades de demanda industrial, comercializadoras y consumidores directos mayores de 1 megavatio (MW).

La primera subasta se celebró el pasado 21 de octubre y se saldó con 500 MW adjudicados a una retribución "parecida" a los 69,97 euros/MWh, ha desvelado Ribera, que confía en que este sistema impulse "nuevos modelos de negocio energético".