Hoy, para variar, se ha visto una intensa actividad de los compradores en el parqué de la Bolsa. Los inversores más resueltos han comenzado a tomar posiciones aprovechando los bajos precios que ha dejado la última racha bajista en la Bolsa. Uno de los resortes que ha disparado las compras, -además de los precios-, ha sido la esperanza de que Demócratas y Republicanos sean capaces de aprobar en los próximos días un nuevo y ambicioso plan de estímulo fiscal y económico en Estados Unidos.

El índice Ibex 35 no ha subido en ninguna de las semanas de septiembre. Así que ya era hora. Hoy los más valientes han tomado posiciones agresivamente con la esperanza de una recuperación a corto plazo, pero, sobre todo, con vistas al medio y largo. El índice Ibex 35 ha subido al cierre un 2,46 por ciento, hasta 6.791 puntos. Han subido prácticamente todos grandes valores, en especial las empresas acereras, los bancos y las empresas relacionadas con el turismo, que son las que más han sufrido y están sufriendo los efectos económicos de la pandemia.

Arcelor se ha disparado más de un 11 por ciento. Recupera los 11 euros y reduce la caída acumulada en el año a menos de un 30 por ciento. Arcelor ha vendido activos en Estados Unidos a Cleveland Cliffs por 1.200 millones de euros. El pago se realizará parte en efectivo (505 millones de dólares) y el resto en acciones.

Los inversores han agradecido especialmente la recuperación de los bancos que, junto con Telefónica, IAG, Repsol e Inditex han restado muchos puntos al Ibex en los últimos meses. Hoy el Santander ha subido un 6,8 por ciento. La presidenta de la entidad, Ana Patricia Botín, ha vuelto a apostar con fuerza por los títulos del banco. Ha comprado acciones y opciones con un precio de ejercicio superior a los 2 euros. Hoy los títulos del banco cántabro han cerrado a 1,65.

Entre los valores más pequeños, destaca la caída a plomo de Sacyr. Ha cerrado con una pérdida del 20 por ciento. La empresa ha sufrido un revés en el ámbito judicial. El laudo sobre sus reclamaciones por el canal en Panamá ha sido desfavorable para la compañía española, que tendrá que pagar 84 millones de euros. Menos ha bajado hoy Azkoyen, que ha reducido su beneficio un 79 por ciento al cierre del primer semestre. Ha ganado 1,3 millones de euros. La compañía ha retirado el reparto del dividendo.

La reacción ha sido hoy intensa, porque intensa ha sido la corrección anterior. La prensa especializada aporta un par de datos a tener en cuenta sobre el calado de la actual racha de vacas flacas que sufre la Bolsa. Uno, que Iberdrola capitaliza ya más que los ocho bancos cotizados juntos. Y dos, que los bancos han perdido dos terceras partes de su valor en tres años. En ese periodo se han volatilizado más de 125.000 millones de euros.

La Bolsa ha reaccionado, pero sin olvidarse de los temores que genera la segunda oleada de la pandemia. Más restricciones equivalen a menor actividad económica. Hoy la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, ha asegurado ante la Eurocámara que el organismo sigue dispuesto a utilizar todos los instrumentos a su alcance para reactivar la economía. Ha añadido que la recuperación continúa siendo “incompleta, incierta y desigual”.

Dentro de casa, el Ejecutivo presentará a comienzos de octubre sus nuevas previsiones económicas. Los mercados creen que empeorará sus proyecciones hasta una contracción del 11 por ciento en este año, frente a la caída del 9,2 que estimaba anteriormente. Con viene recordar que el Banco de España mantiene una previsión todavía peor, con una contracción esperada del 12,6 por ciento en el ejercicio en curso. Y la Comisión Europea espera una contracción del PIB español este año del 10,9 por ciento.