Con altibajos y sin rumbo definido. Así han evolucionado hoy las Bolsas europeas. Los inversores se han movido siguiendo en todo momento las noticias (y los rumores y las hipótesis) que han circulado sobre la forma que finalmente adoptará el divorcio del Reino Unido de la Unión Europea. El índice Ibex 35 ha cerrado en 9.161 puntos, con una pérdida mínima del 0,11 por ciento.  

Han subido las empresas acereras, las eléctricas y algunos bancos. Ha flojeado Telefónica, que ha recibido una rebaja en la recomendación de los analistas de Berenberg. Entre dos aguas ha cerrado Inditex, que publica mañana resultados. Los analistas esperan un crecimiento del 4 por ciento en la facturación, hasta 26.300 millones de euros, con un beneficio superior a los 3.450 millones. Esta última cifra supondría su resultado más elevado de los últimos siete años. 

Con perdidas suaves ha terminado el día Enagás, que ha entrado en el mercado estadounidense con la compra de un 11 por ciento de la empresa Tallgrass Energy por 525 millones de euros. Tras conocerse esta operación, la agencia de calificación de riesgos  S&P ha rebajado un escalón el “rating” de Enagás, hasta BBB+ con perspectiva estable. Sin embargo, la agencia Fitch ha dejado sin cambios la calificación de la empresa gasista. Hoy Enagás ha presentado su plan estratégico. Elevará un 5 por ciento al año su dividendo en este ejercicio y en el próximo. El dividendo pasará de 1,6 euros este año hasta, al menos,  1,74 euros en 2023. 

La Bolsa de Londres ha subido ligeramente, y algo más lo ha hecho la Bolsa de Dublín. El mercado irlandés se ha animado tras las modificaciones a los acuerdos sobre el Brexit que han pactado in extremis el Reino Unido y la Unión Europea, aunque tampoco han faltado las dudas.  En el mercado de divisas, la libra esterlina ha comenzado el día con mucha fuerza, por encima de 1,32 dólares, para luego perder impulso progresivamente según los rumores o las expectativas de los inversores. Por la tarde, antes de la votación del parlamento británico, la libra se cambia por debajo de  1,31 dólares. 

La economía del Reino Unido ha dado hoy señales confusas. El PIB creció en enero a un ritmo del 0,5 por ciento. Su mejor lectura desde finales de 2016.  Sin embargo, la producción industrial británica se ha contraído en nueve décimas y el déficit comercial ha sido más elevado de lo que se esperaba, con 13.000 millones de libras. Hoy se ha publicado también el IPC de Estados Unidos. La inflación creció dos décimas en febrero, con una tasa interanual del 1,5 por ciento, que es su tasa más moderada desde mediados de 2016. 

Dentro de casa, el Tesoro ha colocado hoy letras a 3 y 9 meses. Ha captado 1.350 millones de euros. En ambos vencimientos la rentabilidad es negativa,  pero menos que en la subasta anterior. El Tesoro sigue cobrando a los inversores que colocan su dinero en estos títulos, pero algo menos. El rendimiento de las letras a tres meses ha pasado del menos 0,46 al menos 0,40 por ciento La rentabilidad de los activos a 9 meses ha pasado del menos 0,377 hasta el menos 0,355 por ciento. La demanda, al igual que en las subastas anteriores, ha sido muy superior a la oferta. Hoy ha superado los 6.000 millones de euros. 

El dinero internacional continúa confiando en la economía española. No ha influido la mayor incertidumbre política derivada del adelanto electoral y de la previsible fragmentación del arco parlamentario. El Tesoro volverá a los mercados el jueves día 21, con una nueva subasta de deuda a medio y largo plazo.  Con ella cerrará el calendario de colocaciones de marzo.