La patronal CEOE ha defendido que las empresas deberían poder despedir si las ayudas que reciben para los ERTE no cubren el 100 % de las cotizaciones sociales de los trabajadores en suspenso, dado que la crisis ha situado a muchas de ellas ante la necesidad de ajustar plantilla para poder mantener la actividad.

"O el 100 % de exoneraciones e hibernamos el empleo o hay que levantar las restricciones de la prohibición del despido (...) y eliminar el compromiso de reserva del empleo mientras uno se esté exonerando", ha afirmado este jueves la responsable de relaciones laborales de CEOE, Rosa Santos.

Durante su intervención en el Forum de la Asociación Nacional de Comerciantes de Equipos, Recambios, Neumáticos y Accesorios para Automoción (Ancera), ha subrayado que la realidad de muchas empresas es que ya no pueden aguantar sin adelgazar las plantillas.

No obstante, Santos -que participa por parte de la patronal en todas las mesas de diálogo social abiertas- ha reconocido que para el Gobierno "y en concreto para el Ministerio del Trabajo" el despido es una línea roja que no se va a traspasar.

Según ha dicho, para Trabajo es fundamental que las ayudas públicas estén vinculadas al mantenimiento del empleo.

Para Santos, el mayor hito de la última prórroga de las ayudas a los expedientes de regulación temporal de empleo ha sido haber logrado una exoneración del 100 % de las cuotas a la Seguridad Social para los ERTE de impedimento, figura a la que se pueden acoger las empresas que vean impedida su actividad por las restricciones administrativas.

A su juicio, no hay duda de que las ayudas a los ERTE seguirán más allá del 31 de enero, fecha en la que expira la prórroga vigente, y que incluso se mantendrán cuando acabe la pandemia de la covid-19 como alternativa a las extinciones de contratos.

"Estoy en condiciones de asegurar que van a seguir a partir del 31 de enero. Nuestra petición es que los plazos se adapten a la evolución de la pandemia, como mínimo hasta mayo", ha afirmado.