Los inversores han aprendido a nadar y guardar la ropa. Hoy se han limitado a esperar y ver. Esta semana hay muchas referencias que pueden influir directamente sobre la marcha de los mercados. Celebran sus consejos la Reserva Federal de Estados Unidos, el Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo. Se espera una subida de un cuarto de punto en el precio del dinero de EEUU y de medio punto en Europa. Además, esta semana se celebra una nueva “cumbre” de la OPEP y se conocerá la inflación de la zona euro. Y el viernes se publican los datos de empleo en EEUU. Así que los bolsistas se mantienen alerta, pero sin realizar grandes movimientos.
El índice Ibex 35 cierra el lunes en 9.050 puntos con una suave pérdida del 0,11 por ciento. Han subido algunos valores. Entre ellos, laboratorios Rovi, Cellnex, Banco Santander, Inditex, Logista y Telefónica. Esta semana publicarán resultados Naturgy y los bancos que aún no lo han hecho. Unicaja ofrecerá mañana martes sus cuentas del cuarto trimestre. BBVA lo hará el miércoles y el Banco Santander, el día siguiente. Caixabank rendirá cuentas el viernes. Las mayores caídas han sido hoy para Fluidra y Grifols. Entre los valores más pequeños destaca la subida de las acciones de Urbas. La empresa ha firmado un acuerdo con el gobierno de Arabia para participar en diferentes proyectos inmobiliarios.

Los inversores han tenido hoy mucha tela que cortar. Han tenido que asimilar y estudiar numerosos indicadores. El más relevantes ha sido el PIB de Alemania, que ha experimentado una contracción de dos décimas en el cuarto trimestre de 2022. La tasa anual muestra un crecimiento del 0,5 por ciento, que es inferior al 0,8 que esperaba el mercado. Por su parte, la confianza de empresas y consumidores en la zona euro ha ofrecido en enero una lectura de 99,9 puntos, frente a los 97,0 que pronosticaban los analistas.
En el mercado de deuda se ha tensado la situación, ya que el repunte de la inflación subyacente en España avala el endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo. Avala, al menos, que mantenga el ritmo de subida de tipos de interés. Para el consejo de este jueves se espera un alza de medio punto en el precio del dinero y se espera un mensaje agresivo por parte de la presidenta del BCE, Christine Lagarde. El rendimiento del bono alemán a 10 años alcanza el 2,30 por ciento, mientras los bonos italianos se van hasta el 4,27 por ciento. La rentabilidad del bono español al mismo plazo roza el 3,30 por ciento.

Y es que el dato de inflación adelantado de enero en España no ha tranquilizado a nadie. El IPC ha aumentado un décima, hasta el 5,8 por ciento. El gran problema es que la subyacente -la que no tiene en cuenta los elementos más volátiles como la energía y los alimentos frescos- en el 7,5 por ciento. Es su nivel más alto desde 1986. El miércoles se conocerá el IPC de del conjunto de la zona euro. También se han publicado las ventas al por menor. En 2022 han registrado un aumento medio del 0,7 por ciento.
En el mercado petrolero el precio del barril de crudo del Mar del Norte baja ligeramente, hasta 86 dólares. El miércoles se celebra una nueva “cumbre” de la OPEP. Los analistas esperan pocos cambios. El cartel se limitará a analizar el impacto de las sanciones a Rusia y de la mayor demanda china de carburantes. En octubre la OPEP y sus socios, encabezados por Rusia, decidieron recortar su producción en dos millones de barriles diarios. Y dejaron clara su intención de mantener este recorte al menos hasta finales de 2023.

En el mercado petrolero, a la espera de noticias de la OPEP, el crudo del Mar del Norte se negocia a 86 dólares por barril, uno más barato que le pasado viernes. En el mercado de divisas el euro se cambia por algo menos de 1,09 dólares. La moneda común europea se ha revalorizado de forma lenta pero segura en lo que va de año. En el de deuda pública las obligaciones españolas a diez años ofrecen una rentabilidad del 3,31 por ciento. El Tesoro español colocó la pasada esta semana un bono sindicado a diez años con el que ha captado 13.000 millones de euros. La demanda fue muy elevada, con más de 85.000 millones. La tesorería pública ha aprovechado el creciente apetito por los activos de renta fija. El Tesoro volverá a colocar deuda a medio y largo plazo el jueves, el día 2 de febrero.