El Banquero del Pueblo, experto financiero: “Tener dinero parado en la cuenta es como ver cómo se te derrite un cubito de hielo: en 10 años no te queda ni la mitad”
El experto explica el devastador efecto de la inflación en los ahorros y ofrece las claves para proteger el dinero de este enemigo silencioso

El Banquero del Pueblo
Madrid - Publicado el
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“Tener dinero parado en la cuenta es como ver cómo se te derrite un cubito de hielo: en 10 años no te queda ni la mitad”. La advertencia, lanzada por el experto financiero conocido como ‘El Banquero del Pueblo’, se ha convertido en un faro para miles de ahorradores que observan con preocupación cómo sus esfuerzos se diluyen sin hacer nada. Esta potente metáfora resume a la perfección el efecto devastador de la inflación, un enemigo silencioso que devora el valor de nuestro dinero mientras este permanece inactivo en una cuenta bancaria.
El concepto es más sencillo de lo que parece. La pérdida de poder adquisitivo significa que, aunque la cifra en el extracto del banco no varíe, la capacidad real de comprar bienes y servicios con esa misma cantidad de dinero disminuye con el tiempo. El propio experto lo ilustra con un ejemplo claro: “[Si una persona tiene 100.000 euros en su cuenta y pasan diez años, seguirá viendo el mismo dinero, pero se dará cuenta de que ya no tiene 100.000 euros, sino 70.000 o 65.000]” en términos de lo que puede adquirir.
El diagnóstico: ¿cuál es tu situación financiera?
El primer paso para combatir esta sangría financiera es realizar un autodiagnóstico honesto y completo. Según el experto, todas las personas, independientemente de su nivel de ingresos, comparten dos grandes preocupaciones financieras: luchar contra la inflación y prepararse para la jubilación. Sin embargo, la estrategia no puede ser la misma para quien tiene un gran capital que para quien apenas llega a fin de mes. Ambos deben actuar, pero desde puntos de partida diferentes.
Antes de pensar en invertir, es fundamental construir un fondo de emergencia. Se trata de un colchón de seguridad, equivalente a entre 6 y 12 meses de gastos fijos, que debe permanecer líquido y accesible para imprevistos. Solo una vez cubierto este pilar básico se puede empezar a diseñar una estrategia de inversión, que, según recomienda el experto, debería iniciarse con un 20% o 30% del patrimonio total en renta variable indexada.
Si vas detrás de tipos garantizados, tienes la carrera contra la inflación perdida"
Experto financiero
Para ello, es crucial tener una visión global de todo el patrimonio, sin “hacerse trampas al solitario”. Esto implica sumar los saldos de todas las cuentas e inversiones, incluyendo planes de pensiones o fondos olvidados en distintas entidades. “Hay que analizar todo tu cuerpo, no solo un dedo de tu patita”, insiste. Muchas personas cometen el error de querer asumir riesgos con su dinero líquido mientras mantienen, por ejemplo, un plan de pensiones conservador en renta fija. “¿Qué sentido tiene?”, se pregunta. “Si vas detrás de tipos garantizados, tienes la carrera contra la inflación perdida”.
El asesor y sus productos: ¿estás en buenas manos?
Una vez que se tiene clara la situación personal, el siguiente punto a evaluar es quién gestiona nuestro dinero y qué productos ofrece. El Banquero del Pueblo advierte sobre los conflictos de interés de la banca tradicional y algunos asesores. Su modelo de negocio se basa, en gran medida, en las comisiones que generan los productos que venden, y no todos los productos son igual de rentables para el cliente.
Aquí es donde reside una de las claves: la diferencia entre la gestión activa y la gestión pasiva (o indexada). Un fondo de gestión activa tradicional puede cobrar comisiones anuales de entre el 1,5% y el 2%, mientras que un fondo indexado, que se limita a replicar el comportamiento de un índice como el S&P 500, tiene costes muy inferiores, en torno al 0,12%. Sobre un capital de 100.000 euros, la diferencia es abismal: de 2.000 euros de comisión a apenas 120 euros al año.

Por ello, el experto recomienda una tarea sencilla: comparar la rentabilidad histórica del producto que nos han vendido con el índice de referencia que le corresponde. “Si tienes un fondo de renta variable global, compáralo con el MSCI World. Si es de acciones americanas, con el S&P 500”, explica. Si el fondo, además de cobrar altas comisiones, ha ofrecido una rentabilidad muy inferior a la de su índice de referencia en los últimos 10 o 15 años, las cuentas no salen.
Cómo empezar a optimizar la cartera de inversión
Con toda esta información, llega el momento de pasar a la acción. Para quien empieza de cero, el camino es claro: primero, dimensionar y completar el fondo de emergencia y, después, comenzar a invertir de forma periódica en una cartera indexada global hasta alcanzar ese 20% o 30% del patrimonio. Hacerlo mediante aportaciones mensuales ayuda a mitigar el riesgo de entrar en un mal momento de mercado.
Si ya se tienen productos contratados, como un fondo mixto, el proceso debe ser más cuidadoso. No se puede traspasar todo de golpe a un fondo 100% de renta variable, ya que se estaría aumentando el nivel de riesgo de forma brusca. En estos casos, lo ideal es realizar traspasos periódicos y graduales para alinear la cartera con la nueva estrategia de forma controlada y segura.

El mensaje final del experto es de empoderamiento. Tomar las riendas de nuestras finanzas no requiere ser un experto, sino aplicar el sentido común y la constancia. “Igual que si no has ido al gimnasio nunca, no tiene sentido que hoy vayas 4 horas porque te vas a reventar. Lo que tienes que coger es una dinámica, coger el hábito de ir cada semana. Esto es un poco lo mismo”. El primer paso, el más difícil, es simplemente empezar.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.



