El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha calificado como "un exceso" la propuesta del líder del PP, Pablo Casado, de aplicar el artículo 155 de la Constitución en materia educativa para que la Generalitat cumpla la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a las escuelas catalanas a impartir al menos un 25 % de las clases en castellano.
"Es un exceso más dentro del conjunto de los excesos a los que nos tienen acostumbrados la derecha del señor Pablo Casado, que está más preocupado por competir con la extrema derecha que por resolver los problemas de la ciudadanía", ha dicho el ministro a la salida de su intervención en el Pleno del Congreso para defender los presupuestos de su departamento.
En este sentido, Garzón ha señalado como "evidente" la necesidad de que la política discurra "por cauces políticos" y no judiciales.
Durante su comparecencia en la Cámara Baja, el ministro ha defendido el presupuesto de su departamento, que se va a elevar un 20,65 por ciento en 2022.
Entre las nuevas partidas económicas, Garzón ha destacado las destinadas a campañas publicitarias que fomenten un consumo responsable o impulsen el comercio de proximidad, así como reforzar la inspección del juego "online", entre otras.
"Dinero y recursos públicos destinados a una mejor alimentación, salud y esperanza de vida" de la población vulnerable, que es, según el ministro, los niños y las familias sin recursos.
Desde la oposición, la diputada del PP María Carmen Riolobos ha recriminado a Garzón la subida del precio de la luz, el "ataque" a la industria cárnica y el etiquetado de alimentos Nutriscore: "cada vez que habla usted sube el pan".
El diputado de Vox Tomás Fernández también ha criticado dicho etiquetado y ha acusado al ministro de ser "el enemigo de los productos alimentarios españoles", mientras que el parlamentario de Cs Guillermo Díaz ha pedido "mejorar" la información de las etiquetas de los productos pero "sin prohibir".