Este Viernes de Dolores muchos españoles hacen las maletas y cogen el coche para comenzar sus vacaciones. Desde las 15:00 horas de esta tarde hasta las 24:00 horas del Lunes de Pascua, se esperan más de 16.500.000 de desplazamientos por carretera en un momento en el que el precio de la gasolina no deja de subir.

Este viernes, 22 de marzo, el litro de gasolina se paga de media a 1,61 euros y el litro de diésel a 1,53 euros. Aun así, son precios algo más bajos que los de hace un año, y lejos de los máximos del verano de 2022, cuando los carburantes estuvieron a punto de superar la barrera de los 2 euros el litro impulsados por la guerra en Ucrania.

Llenar el depósito ha subido un 4 % de media desde el inicio del año y ya cuesta casi 89 euros en el caso de la gasolina y 84 euros si es de gasoil. Detrás del repunte de los precios están las tensiones en el mercado del petróleo por la reducción de la producción.

Inés cardenal, de la Asociación Española de operadores de productos petrolíferos, señala en COPE que "por el lado de la oferta vemos una gran demanda, fundamentalmente, en Estados Unidos aunque China y Europa están consumiendo un poquito menos de lo que se preveía, pero bueno también está creciendo la demanda, y por el lado de la oferta vemos que la OPEP sigue con su política de recorte de producción de crudo".

Estamos ante la segunda Semana Santa más cara de la historia al volante, pero con unos carburantes que siguen por debajo de la media europea.