Miguel de Cervantes, la liberación de un genio
El 19 de septiembre de 1580, el máximo exponente de la literatura española era liberado en Argel tras 5 años de cautiverio
Rodrigo Paz
Tiempo de lectura: 2'Actualizado 06 mar 2024
Tal día como hoy, un 19 de septiembre de 1580, el máximo exponente de la literatura española, el escritor Miguel de Cervantes Saavedra era liberado de su cautiverio en Argel.
Miguel de Cervantes fue el cuarto hijo del matrimonio de Rodrigo de Cervantes y Leonor Cortinas. Cuando alcanzó la mayoría de edad, huyó a Italia tras haber herido a un hombre.
En Italia estuvo al servicio del Cardenal Acquaviva hasta que se formó en como soldado e ingresó en el Ejército. En 1571 participó en la batalla más sangrienta de la historia, la batalla de Lepanto. Un enfrentamiento en el que en tan solo seis horas se produjeron más de 61.000 víctimas, entre muertos y heridos. Uno de esos heridos fue Miguel de Cervantes, que había recibido dos disparos de arcabuz. Uno en el pecho y el otro en su mano izquierda, de la que perdió su movilidad y por la que se le conoce como el 'manco de Lepanto'.
El accidente no le impidió continuar sirviendo como soldado, y en 1575, durante su regreso desde Nápoles a España a bordo de la galera Sol, una flotilla turca comandada por Mami Arnaute hizo prisioneros a los soldados que iban a bordo de la nave, entre ellos Miguel de Cervantes y su hermano Rodrigo.
Los prisioneros fueron enviados a Argel, una ciudad que en aquella época era el mayor nido de piratas en el Mar Mediterráneo en la que se encontraban más de 25.000 cristianos presos. Durante su cautivero, Miguel de Cervantes intentó darse a la fuga hasta en cuatro ocasiones, todas ellas fallidas. En 1980 gracias a su familia y a los padres trinitarios, Cervantes era liberado tras 5 años de cautiverio.
Tras su liberación intentó conseguir un empleo en las Indias, aunque nunca lo consiguió. En 1584 se casó con Catalina de Palacios Salazar y se estableció en Sevilla. Allí trabajó como comisario de abastecimientos revisando los alimentos que se utilizarían en las expediciones que preparaba el Rey Felipe II.
En 1604 se trasladó a Valladolid, ciudad en la que escribió la primera parte de su gran obra, 'El Quijote'. Una de las mejores obras de toda la literatura universal y que salió a la venta ese mismo año tras obtener de la Casa Real la licencia para imprimir.
La obra fue un éxito total, y su segunda parte fue publicada en 1615. Su última obra, 'Los trabajos de Persiles y Sigismunda', fue dedicada al conde de Lemos y acabada pocos días antes de su muerte que tuvo lugar el 23 de abril de 1616 en la ciudad de Madrid.
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