Lefties Digital Store Montera Madrid ha abierto sus puertas este viernes en la capital con 4.000 m2 de superficie distribuidos en tres plantas y la mayor pantalla 3D del mundo en el interior de una tienda física, en la que la digitalización se presenta como eje funcional y la experiencia trasciende el hecho de comprar ropa.

Cientos de curiosos se han acercado al lanzamiento de la superficie, ubicada en el número 25 de la madrileña calle de Montera, a escasos metros de la Gran Vía, y han adquirido las primeras prendas al ritmo de los éxitos comerciales del momento, en un ambiente festivo amenizado por un pinchadiscos que ha hecho vibrar tanto a los clientes como al personal de la tienda.

Nunca había estado en un sitio así. Yo pensaba que a las tiendas se venía solo a comprar, ha reconocido Sara, una joven madrileña absorta por la enorme pantalla 3D que preside el comercio, la más grande del mundo en el interior de una tienda física, según fuentes de Lefties.

Lefties apuesta por el concepto experiencial e incorpora, además de estantes de ropa, una cafetería, máquinas de juegos "arcade" a lo largo y ancho del espacio -con clásicos imperecederos como "Pac-Man" o "Street Fighter"- y fuentes de agua repartidas en distintos enclaves.

PROBADORES INTELIGENTES

La superficie incorpora la automatización de las rutinas propias en un comercio con la implantación de probadores inteligentes y el sistema de pago fácil, dos métodos que permiten que no haya personal de la tienda atendiendo estas dos tareas, más ágiles que la forma tradicional.

En el caso de los probadores inteligentes, el cliente debe seguir las instrucciones de una pantalla que le dirigirá a una cabina libre. Allí, tras elegir lo que sí se llevará, podrá desechar las prendas restantes en una suerte de buzón que recogerán los empleados.

El pago de la ropa, que no lleva alarma en ningún caso, se realiza a través de puestos que Lefties define como pago fácil. El cliente lleva la ropa a una pequeña plataforma que, automáticamente, detecta el precio y, después, se paga con tarjeta en un datáfono siguiendo las instrucciones de una pantalla.