(Actualiza la NA7067 con la expresión de apoyo del Grupo de Periodistas Pi i Margall)

La Junta Directiva de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha acordado respaldar al periodista Javier Negre, del diario El Mundo, "ante la campaña de acoso en las redes contra él y su familia que están promoviendo la CUP y grupos independentistas catalanes afines".

En su primera reunión, la Junta elegida el pasado 14 de abril, ha rechazado "tajantemente" esta campaña, "cuyo único objetivo es acallar su voz e impedirle que ejerza el periodismo libremente", ha informado en un comunicado.

Además, el Grupo de Periodistas Pi i Margall, única asociación de periodistas catalanes adherida a la FAPE, ha manifestado su apoyo este comunicado en respaldo a Negre.

Para Sergio Fidalgo, presidente del Grupo Pi i Margall, es "intolerable que hechos así, más propios de una dictadura, pasen en una nación democrática como España", por lo que expresa el total apoyo de esta asociación a la FAPE en todas la acciones que decida emprender en defensa del periodista.

El acoso comenzó a raíz de que Negre difundiera en El Mundo la identidad de los nueve profesores del colegio Sant Andreu de la Barca (Barcelona) denunciados por la Fiscalía por humillar supuestamente a alumnos hijos de guardias civiles.

La campaña incluye insultos y amenazas al periodista y el anuncio de que iban a buscar datos suyos y de su familia, como números de teléfono y domicilio.

El Mundo, según la FAPE, informó de que este llamamiento surtió efecto y los datos personales de los padres del periodista se hicieron públicos, además de fotografías que pertenecían a su más estricta intimidad.

La federación de periodistas reclama el cese de esta campaña de acoso e insta a sus promotores a que respeten la libertad de expresión y el derecho de los ciudadanos a estar informados por los periodistas con noticias veraces y comprobadas.

Considera que las campañas de amenazas a periodistas en las redes, como la que está sufriendo Negre, tratan de impedir el libre ejercicio del periodismo a fin de imponer un régimen de miedo que conduzca a la censura y a la autocensura y a la supresión de determinadas investigaciones periodísticas.