Se acerca la Nochevieja, y con ella el sonido para despedir el año volverá a ser el mismo: petados y más petardos. Sin embargo, la moda de la pirotécnia a cambiado. Ahora los bilbaínos buscan petardos menos ruidosos y perjudiciales. Una opción cada vez más precuente para evitar inendios estos días de fiesta.

Tanto es así que los Bomberos de la Diputación de Bizkaia han vuelto a pedir extremar las precauciones con la pirotécnica para evitar incendios. Y es que en la pasada Navidad realizaron 87 salidas, 25 de ellas por fuegos. "El Servicio de prevención, extinción de incendios y salvamento realiza múltiples intervenciones relacionadas con la utilización inadecuada de estos elementos festivos, especialmente los días de Nochevieja y Año Nuevo. Los artefactos pirotécnicos, aunque son para muchas personas fuente de diversión, conllevan riesgos que no deben subestimarse", han añadido los bomberos vizcaínos.

Mensajes como éste se han repetido a lo largo de toda la semana por parte de los diferentes ayuntamientos vascos. Todos piden precaución. Donostia e Irun, por ejemplo, han recordado que está prohibido el uso de petardos y bengalas en la vía pública. Y es que su mal uso podría suponer multas de hasta 750 euros. El consistorio vitoriano recomienda tirar petardos únicamente en los primeros quinceminutos después de las campanadas para respetar los efectos negativos que puedan suponer entre las personas más vulnerables como las personas mayores.

Más petardos, menos ruidosos

En COPE Euskadi nos hemos preguntado si las restriciones han hecho bajar las ventas en tiendas como CM Petardos, con sedes en toda España. La respuesta es no. Todo lo contrario, las ventas han aumentado, ya que cada vez más gente compra pirotécnica pero menos ruidosa. "Hemos aumentado un 10% nuestras ventas entre bombetas y fuentes. Ahora se buscan petardos divertidos y que no perjudiquen a nadie", asegura Josep, gerente de CM Petardos.