La Guardia Civil ha encontrado en los registros llevados a cabo por el triple crimen de Chiloeches (Guadalajara), varias joyas presuntamente robadas a la familia asesinada.

Fuentes próximas a la investigación han indicado a EFE que, entre esas joyas, se encuentra una pulsera tipo esclava propiedad, sin ningún género de duda, de la mujer de 52 años que, junto a su marido y su hija de 22 años, fueron asesinados en la madrugada del sábado en su domicilio de Chiloeches (Guadalajara).

La principal hipótesis que manejan los investigadores es que el móvil del crimen fue el robo y que fue llevado a cabo por uno de los tres detenidos, en tanto que los otros dos, otro hombre y una mujer, podrían haber encubierto los crímenes.

Este lunes, la Guardia Civil practicó tres registros en Daganzo de Arriba (Comunidad de Madrid) y en Pioz (Guadalajara), dos de ellos en domicilios.

En estos registros, los agentes han podido recabar múltiples indicios que podrían reforzar que uno de los detenidos es el presunto autor material de los crímenes y que los otros dos actuaron como encubridores.

Los tres arrestados, que son personas conocidas de la hija, ya están a disposición del Juzgado de Instrucción número 4 de Guadalajara, que se hizo cargo del caso por estar en funciones de guardia el sábado 13 de abril.